El Gobierno de Curtis aprobó ayer en solitario el Reglamento Orgánico Municipal (ROM). El Ejecutivo no logró alcanzar un acuerdo del BNG, que presentó varias alegaciones al documento y solo consiguió que prosperasen dos. El Ejecutivo accedió a aceptar las sugerencias referidas a no poner límites a los ruegos que se puedan presentar a los plenos y la publicación en la página web de las grabaciones de las sesiones plenarias (salvo aquellas que, incide el Concello, "puedan afectar al derecho de los ciudadanos referidos en el artículo 18.1 de la Constitución).

Los cambios en el documento no bastaron a la oposición, que votó en contra. El Ejecutivo destacaba ayer que este reglamento permitirá a los vecinos participar en los plenos y establece consejos sectoriales de participación en los que tendrán presencia los ciudadanos y las asociaciones. El alcalde, Javier Caínzos, se mostró convencido de que la normativa permitirá una mayor transparencia en la gestión y destacó la publicación del registro de bienes e intereses.

El BNG criticó la supresión de las comisiones informativas y exigió un horario de plenos que favoreciese la asistencia.