El Concello de Cambre contratará en los próximos días la obra que solucionará de modo provisional las filtraciones en la cubierta de la piscina de A Barcala y permitirá reabrir la instalación. El Concello recibió ayer el proyecto de ejecución de los trabajos. El Ayuntamiento evita concretar la fecha en que podrá reabrir la piscina ya que dependerá de la tramitación previa a las obras y del tiempo meteorológico, puesto que el plazo de ejecución de los trabajos será de 15 días si no llueve y de un mes si la lluvia complica las obras.

La concejal de Deportes, Elisa Pestonit, firmó ayer el proyecto de ejecución de los trabajos. Las obras servirán para corregir los problemas detectados durante una obra anterior y mientras no se consiga financiación para sustituir la cubierta. El Concello recibió el pasado mes de agosto los trabajos anteriores, durante los cuales se descubrieron más problemas en la cubierta y el Gobierno local consideró "irresponsable" reabrir la instalación al público en esas condiciones, por lo que impulsó una obra que pare las filtraciones y ponga solución temporal al problema.

La piscina lleva cerrada desde el pasado mes de marzo, cuando comenzaron los trabajos contratados por el anterior Ejecutivo municipal para corregir otros problemas que soportaba la instalación. La obra anterior, que costó 319.000 euros y estuvieron financiadas al 75% por la Diputación, consistió en reformar los vestuarios, la playa de la piscina y su vaso, así como mejoras en el sistema de climatización, los techos interiores, pavimentos, estructuras interiores y la carpintería exterior de las instalaciones.

El alcalde, Óscar García Patiño, aseguró que intentará obtener fondos de la Diputación para reemplazar la cubierta por otra en buen estado y cambiar el sistema de impermeabilización, ya que, advirtió, por ahora no resulta económicamente viable. El regidor apostó por agilizar la contratación de los trabajos que solucionasen de modo provisional las filtraciones de la cubierta para poder responder a las peticiones de los vecinos de reabrir la instalación tras casi siete meses fuera de servicio.