El Concello de Arteixo aprobó ayer, con el voto favorable de todos los grupos, extender la bonificación del 95% de la plusvalía a todas las herencias de ascendientes, descendientes y parejas. La propuesta la llevó el Gobierno local pese al informe desfavorable de la interventora, que advierte de que el Ayuntamiento no debe renunciar a cobrar parte de este impuesto al estar con un plan económico-financiero en funcionamiento. El Concello dejará de ingresar aproximadamente 300.000 euros por año. Así se lo recordó la oposición en la sesión, a pesar de que después la apoyó.

El informe de la interventora sobre extender la bonificación también aludía al incumplimiento del plan económico. "El informe es demoledor. Gastamos más de lo que ingresamos", alertó el portavoz del PSOE, Martín Seco. TeGa también al incumplimiento de los objetivos de estabilidad presupuestaria.

La diferencia entre ingresos y gastos a la que alude el informe de la interventora procede de incorporar remanente al presupuesto. La nacionalista Silvia Seixas explicó que fue un ministro del PP, el mismo partido que gobierna en Arteixo, el que aprobó la ley que impide reconocer los remanentes como ingresos.

La bonificación del 95% en la plusvalía se aplicaba hasta ahora en vivienda habitual o en negocios propios. La justificación que dio el concejal de Servicios Económicos, José Baldomero, para aplicar esta rebaja fue que quedaría compensada con el incremento en la recaudación del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) tras una revisión realizada en el polígono de Sabón. "Hay una subida de 300.000 euros y más lo adeudado de ejercicios anteriores: 600.000 euros", señaló. Y destacó que de esta manera se sustituye "un impuesto de clase baja por uno industrial". Seixas señaló que si la recaudación va "tan bien" el Concello podría eliminar el cobro de la plusvalía porque no es obligatoria.

Baldomero respondió que eliminar este impuesto por completo supondría que el Ayuntamiento arteixán dejase de percibir un millón de euros. "No es bueno. Afectaría al esqueleto de la recaudación", aseguró. El alcalde, Carlos Calvelo, indicó que es un "impuesto injusto". Fue la misma argumentación que ofreció sobre la ley de estabilidad presupuestaria. También afirmó que el Concello dispone de cuatro millones de euros de remanente y que espera acabar el año con cinco millones. Baldomero aludió también a que el incumplimiento del plan económico se debe a un "déficit teórico" porque la ley no permite incorporar el remanente como ingreso.

Nuevas cocinas escolares

El Gobierno local se comprometió en el pleno a empezar las obras de las cocinas de los colegios Ponte dos Brozos y Arteixo el próximo verano. Así lo confirmó el portavoz del Ejecutivo, José Ramón Amado. "La Consellería no tiene problema en autorizarlo", aseguró el edil. Ofreció esta fecha a raíz de una pregunta del PSOE sobre las instalaciones de los centros escolares.

El ANPA del Ponte dos Brozos reclama una reforma de la cocina, ya que según denuncian es muy antigua. Y la del CEIP Arteixo carece de cocina. El portavoz socialista, Martín Seco, denunció que el Gobierno local no tiene un proyecto técnico para hacer las obras, algo que confirmó José Ramón Amado. "Tenemos un borrador. Por ahora no hay proyecto porque quedan por saber dos casos: el espacio de la cocina y la falta de frío", argumentó Amado.

En otra pregunta el BNG criticó la "falta de transparencia" en la adjudicación de la cafetería de la piscina municipal, ya que es la empresa que gestiona el recinto quien lo ha hecho. El portavoz del Ejecutivo respondió que la cafetería "forma un todo" y que el Concello se limitó a imponer unas condiciones como que no se venda alcohol en el recinto.