El Concello de Cambre ha dado tres meses al Arzobispado de Santiago para que presente un proyecto para la reparación de la cubierta de la rectoral de Bribes y advierte de que le impondrá las sanciones pertinentes si incumple el plazo. Técnicos del Ayuntamiento y arquitectos enviados por el Arzobispado visitaron ayer el edificio de la rectoral de la parroquia de San Ciprián de Bribes "para dar solución al inminente desplome del edificio" y la rectoral de Andeiro, que ha sido tapiada. Los técnicos enviados por el Arzobispado se comprometieron a tomar medidas para la conservación de los inmuebles.

Para la rectoral de Bribes, la primera medida que adoptará el Arzobispado será arreglar la parte del muro exterior que da a un camino municipal, que en los últimos días ha sufrido un desprendimiento y "podría resultar peligroso para los transeúntes del camino de la Iglesia", advierte el Concello. El técnico municipal insistió en que la reparación del paramento es "urgente" y reclamó que se subsane el mal estado "en las próximas semanas". Los arquitectos del ente eclesiástico aceptaron.

El arquitecto municipal insistió también a la empresa de arquitectura enviada por el Arzobispado en que el mal estado de la cubierta, que se desplomó por un temporal hace casi dos años, es otro aspecto "preocupante". El técnico del Ayuntamiento concedió a los arquitectos tres meses de plazo para presentar un proyecto en el Ayuntamiento y advirtió de que, de lo contrario, se tramitarán las sanciones pertinentes.

Hace varias semanas el concejal de Urbanismo, Juan Leirós, dio orden a los técnicos municipales de notificar al Arzobispado las obras que deberían poner en marcha mediante un expediente de disciplina en ambos edificios. En el texto se declaraba que, de no adoptar medidas, el Ayuntamiento iniciaría las correspondientes sanciones debido al riesgo que supone el mal estado de los inmuebles, en concreto, el peligro de la desplome de nuevas partes del muro para los transeúntes del camino de la Iglesia, además de la probabilidad de que la construcción acabe por venirse abajo.

En la rectoral de Andeiro, la Iglesia ha cumplido el primero de los puntos exigidos por el Concello y ha tapiado el edificio. El siguiente paso será presentar un proyecto para su restauración. El Gobierno local espera que estas mejoras marquen el inicio de la recuperación del patrimonio municipal.