El Juzgado de lo Mercantil Número 1 de A Coruña ha rechazado la demanda del Concello de Miño en la que solicitaba ser reconocido como acreedor preferente y no ordinario en el concurso de Martinsa-Fadesa. Miño pidió que se le reconociese un crédito contra la masa en el concurso por importe de 19.929.175 euros (más recargo más intereses) para tener acceso con más rapidez a este dinero y poder abonar así las indemnizaciones que se les deben a los expropiados para construir la urbanización de Vilanova-Perbes. La sentencia se emitió el pasado día 15 y el Concello ya llevará a pleno en los próximos días la propuesta de recurrirla.

Si se le declaraba crédito contra la masa en el listado de pago a los acreedores Miño tendría prioridad a la hora de cobrar pero el juzgado ha rechazado esta petición porque considera que el crédito del Concello es concursal, ordinario, así que deberá esperar su turno. El juzgado decidió excluirlo de la consideración de crédito contra la masa porque el contrato entre Concello y Martinsa-Fadesa que dio origen a esa obligación se firmó "con posterioridad a la declaración de concurso", se realizó en la fase del convenio de Martinsa-Fadesa.

La magistrada toma como contrato de referencia del que surgieron las "obligaciones recíprocas" entre las dos partes el firmado en diciembre de 2011, tras realizarse la nueva adjudicación de la urbanización y no el de 2002 porque ése fue anulado por sentencia judicial. Y el contrato de 2011 es posterior al concurso de la inmobiliaria así que no se puede hablar de "obligaciones recíprocas pendientes de cumplimiento que continuaron en vigor tras la declaración de concurso".

El Ayuntamiento basó su demanda en la sentencia de abril de 2015 en la que el juzgado confirmó la legalidad de obligar a Fadesa a constituir una garantía por importe de 19.929.175 euros para asegurar los pagos de los justiprecios de los bienes y derechos expropiados para ejecutar la urbanización de Perbes-Vilanova. El mes que viene finaliza el plazo de cuatro meses que se le otorgó para abonar el dinero que se le debe a los expropiados.

Salarios

Solo dos personas cobrarán del Ayuntamiento de Miño y la que le dedicará más horas será la que cobre menos. En el régimen retributivo que ha diseñado el nuevo bipartito del municipio tras la alianza entre el Partido Popular y el alcalde y único integrante del Gobierno, se ha fijado que solo exista una dedicación exclusiva, la del primer teniente de alcalde Jesús Veiga, que cobrará 29.344 euros en 14 pagas, lo que supondrá 2.096 euros cada mes.

El alcalde, Ricardo Sánchez Oroza, tendrá solo una dedicación parcial de 32 horas a la semana y percibirá una retribución de 37.870 euros al año, que supondrán 2.705 euros al mes. En el pleno también se propondrá una indemnización por asistencia a plenos o comisiones de 80 euros.

El nuevo Ejecutivo municipal celebrará el próximo martes 2 de febrero su primera comisión informativa previa al pleno. Uno de los primeros puntos del orden del día es el cambio de horario de celebración de las sesiones plenarias que ahora serán a las diez de la mañana en lugar de a las seis de la tarde, pero seguirán celebrándose los terceros martes de los meses pares.

En este próximo pleno se dará cuenta además de la nueva estructuración de las áreas de Gobierno y de los nuevos nombramientos para formar las Juntas de Gobierno Local, las delegaciones de cada alcalde y las designaciones para representar a la corporación en órganos colegiados.

El regidor llevará la Concejalía de Transparencia y Participación Ciudadana y Jesús Veiga se encargará de Desarrollo Local, Planes, Vías, Obras y Empleo. Josefina Romeu se encargará de Bienestar Social, Igualdad, Comercio y Turismo; y Agustín Andrés estará al frente de Urbanismo, Medio Ambiente, Contratación, Hacienda y Personal. Antonio Doce gestionará Medio Rural, José Paz llevará Deportes y Juventud y Ana Picos será concejal de Educación y Cultura.