"Recuerdo cuando me vino a visitar un día una concejala de Iñás y me dijo al llegar 'no sabía que vivías tanto en el monte'. Y yo le dije, 'pero mira para ahí, veo el mar, el faro, la bahía, la Torre de Hércules'. Prefiero esto a ver toda la Nacional VI, que es lo que veis en Iñás", cuenta Ramón García, el que ha sido presidente de la Asociación de Veciños de San Cosme de Maianca en los últimos quince años y que acaba de dejar el cargo.

A Ramón, nacido en esta parroquia y de padre también oriundo del lugar, no le sorprende que los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) muestren a esta pequeña parroquia de solo cinco núcleos como la de mayor proyección en el último lustro, al aumentar un 14% sus habitantes desde 2010 hasta 2015, por delante de Liáns, que es la parroquia más poblada al acabar de superar los 10.000 vecinos.

Maianca recoge Broño, Cabreira, Canide, A Lagoa y el propio núcleo tradicional de Maianca y suma 1.338 habitantes, 165 más que en 2010. "Todo el mundo quiere venir a vivir aquí y los que vinieron están muy contentos. Al resto le gustaría venir pero no pueden, el precio no es barato. Uno que conozco quería tener casa en Maianca pero al ver los precios dijo que con lo que le pedían podía comprar media Malpica. Yo le dije que lo que gusta, hay que pagarlo", relata Ramón García, quien destaca que esta parroquia tiene un espectacular paisaje con vistas a la bahía coruñesa, el entorno de la laguna de Mera, pero también importantes zonas de bosque, un río y un núcleo tradicional, más rural, de gran belleza también, además de contar con una de las iglesias más bonitas de la comarca, de origen perrománico.

"Maianca coge parte de Mera, desde la farmacia hacia abajo. Hacia arriba ya es Serantes. Incluye urbanizaciones grandes como la de Canide, Pía de Maianca o Pinar del Río. El límite entre Serantes y Maianca es difícil. En las elecciones, la margen izquierda de la carretera da Besta era Serantes y la derecha, Maianca", añade García.

El crecimiento poblacional de Maianca aumentará exponencialmente a medio plazo porque están en marcha dos urbanizaciones en la zona, la del sector de Xentiña donde se prevén construir 208 viviendas y la de Cividás con 120. A una media de dos vecinos por vivienda ya superaría las 700 personas. Esta parroquia se configura por lo tanto como una de las de mayor proyección. "Además, ahora, con la vía ártabra, en tres minutos estás en Espíritu Santo", apunta este líder vecinal. La escuela infantil también ayudó a fijar población en este núcleo al que solo le faltan comercios (sí tiene banco, bares, restaurante, panadería o alojamientos).