Ver el puerto exterior de A Coruña y el de Ferrol desde un mismo lugar es posible. Ocurre en el parque forestal de Monticaño de Arteixo. Un lugar desde el que se puede ver Pastoriza, Meicende, Morás, Arteixo, A Coruña, A Zapateira y a lo lejos todas las rías hasta Ferrol. Esta zona verde disputa su última batalla contra el abandono de sus emblemas.

El presidente de la asociación social y cultural O Grilo, Pablo Mariño, se lamenta del estado en el que se encuentra Monticaño. "Podría convertirse en un parque multifunciones", asegura. Pero el parque actualmente apenas soporta el paso del tiempo. Hay dos piezas antiaéreas Flak, un cañón Vicker y un búnker de telemetría que apenas resisten al óxido, el vandalismo y al total abandono. También están tiradas a la intemperie las piezas de lo que fue otro cañón. El parque es propiedad del Ministerio de Defensa pero está cedido al Concello.

La Dirección Xeral de Patrimonio Cultural explica en un informe elaborado sobre Monticaño con motivo del proyecto del centro de interpretación que los antiaéreos y el cañón son "un testimonio singular de la historia militar española del siglo XX". El informe destaca que estas instalaciones se construyeron en 1926 como parte de un plan del Gobierno para proteger las bases de la Armada . Y señala que este plan fue "uno de los intentos más ambiciosos" de dotar al litoral español de un sistema defensa militar con la artillería "más poderosa" de la que dispuso España.

Uno de los problemas que detecta Mariño está en los accesos. Pastoriza está a menos de dos kilómetros y la carretera no cuenta con aceras. "Hay que ir por el arcén", indica Pablo Mariño. Por el vial apenas cogen dos coches y por aquí normalmente circulan camiones que proceden de las instalaciones del vertedero de Monticaño. Es el único acceso que existe en la actualidad para ir al parque.

El entorno del parque está invadido por plumachos y por eucaliptos, según denuncia Mariño. El aparcamiento es otra asignatura pendiente. Hay dos explanadas cercanas que a día no se usan. Otra de las demandas de la asociación es que se instalen más bancos y merenderos y que el Concello repare los letreros caídos, además de promocionar más esta zona verde.