Tres agentes de la Policía Local de Sada declararon ayer como testigos en el Juzgado de Betanzos, que investiga la desaparición de unos cien euros de un sobre que contenía un ingreso por el servicio de grúa en julio de 2013. El caso, que le valió una imputación al inspector jefe, está todavía en fase de instrucción.

Según ha podido saber este diario, los efectivos mantuvieron ante el juez que el jefe de la policía era el último responsable de la cadena de custodia. Uno de los testigos sostuvo además que advirtió al inspector de que no se había efectuado el ingreso de los cien euros y que este le respondió que lo haría cuando lo considerase oportuno.

El juez citará en breve a declarar a personal de la Tesorería municipal para intentar arrojar luz sobre este asunto, que el anterior Gobierno local puso en conocimiento del juzgado en enero de 2014. El Concello, bajo el gobierno del PP, emitió un informe en que responsabilizaba directamente al jefe de la policía.

Consultado ayer sobre este asunto, el alcalde, Benito Portela, declaró desconocer en qué fase se encuentra el proceso y aseguró que el Concello no ha recibido ninguna notificación. "No nos han comunicado nada", mantuvo el regidor, que añadió que analizarán la posibilidad de personarse. El PP, que gobernaba cuando se derivó el caso al juzgado, se mostró sorprendido de que el Concello no esté personado. "Me sorprende que el actual alcalde se inhiba ya que se trata de la defensa del dinero público y la asunción de responsabilidades de gobierno", lamentó Ernesto Anido.