Han hecho falta casi dos décadas para que Sada entre en la recta final de la redacción del plan general. El documento urbanístico que mañana se elevará a pleno se expuso ayer a la ciudadanía en un acto en la Casa da Cultura que permitió a los vecinos disipar sus dudas sobre el modelo urbanístico que recoge el PGOM.

Como incidieron todos los grupos que participaron en el encuentro de ayer, el plan general que se debatirá mañana en pleno fue elaborado por tres gobiernos: el del bipartito, del PP y el actual Ejecutivo de Sadamaioría, BNG y PSOE. Y, paradójicamente, todo apunta a que dependerá del apoyo del PDSP para que su aprobación definitiva, como destacó el exalcalde, Ernesto Anido, durante el acto.

El descenso en la previsión de viviendas -unas trescientas mínimas de las recogidas inicialmente-; el recorte en el suelo industrial, que se compensará con una mayor ocupación; los cambios en la zona de transición de As Brañas; la eliminación de sectores urbanizables como el de Pazos o de algunos planes de ordenación de núcleo rural o la inclusión del pazo de Meirás en un plan especial de protección del patrimonio que abrirá la puerta a su recuperación en un futuro fueron algunos de los asuntos que desgranó ayer el concejal de Urbanismo, Francisco Montouto.

El edil reconoció que el urbanismo en Sada es "complicado y difícil" y no dudó en agradecer el trabajo realizado por los gobiernos anteriores en la redacción del documento. Los vecinos presentes en el acto aprovecharon el acto para preguntar por diversas cuestiones, como el futuro de As Brañas, del polígono de O Tarabelo, las previsiones para la cafetería El Náutico, el edificio de La Sociedad o el túnel de Fontán.

La inclusión del enlace de la vía ártabra con la carretera AC-163 y del falso túnel en el PGOM ha propiciado el malestar de los afectados y de críticos con la infraestructura, que ayer aprovecharon el acto para interesarse por este asunto. El Gobierno local justificó la inclusión del trazado hasta la AC-163 y del falso túnel por la imposición de la Xunta, que ha publicado ya el proyecto de la conexión hasta la AC-163 y que todavía no ha descartado el túnel-. "Nosotros estamos en contra del trazado y llegado el momento nos opondremos, pero estamos obligados a incluirlo", sostuvo Montouto, a preguntas de un vecino, concretamente el exconcejal del BNG Carlos Silvar, que se interesó también por el futuro de las antiguas telleiras de As Brañas. El Ejecutivo explicó que el PGOM las recoge como equipamiento público y que plantea su rehabilitación o la creación de un área de interpretación.

El acto dio pie también a un pequeño enfrentamiento entre el PP, que aprovechó para exigir nuevamente un nuevo plazo de exposición pública, y el Gobierno local, que insistió en que los cambios introducidos no son sustanciales y apeló a la necesidad de aprobar el documento antes de que entre en vigor la Lei do Solo para evitar más retrasos.