El Tribunal Supremo decidió no refundir las nueve condenas a Antonio Fernández Borque, un delincuente conocido por numerosos delitos perpetrados en la provincia de A Coruña entre 1999 y 2009. Borque estuvo acusado de participar, junto a su mujer y otra pareja, en el descuartizamiento de los dos hombres que fueron asesinados en una vivienda de Aranga en 2008. La Audiencia Provincial, sin embargo, lo absolvió por falta de pruebas.

En total, el procesado tenía nueve condenas de entre seis meses y dos años de prisión, que suman un total de diez años, seis meses y veintitrés días de reclusión por hechos ocurridos entre 1999 y 2009 y sentencias emitidas entre 2002 y 2013.

El hombre solicitó al alto tribunal la "la refundición de condenas" ante el Juzgado de lo Penal número 6 de A Coruña, que en 2014 desestimó esta petición, por lo que recurrió su decisión ante el Tribunal Supremo. El alto órgano jurisdiccional consideró esta semana que la refundición "no le favorecería" y, por lo tanto, desestimó el recurso del encausado y dio la razón al juzgado de A Coruña.