Pocas veces una actividad escolar tendrá una aplicación tan práctica y a la vez tan divertida para quien la lleva a cabo como la desarrollada por los alumnos del instituto arteixán Manuel Murguía, que ayer representaron en el centro cívico de la localidad una adaptación del musical Chicago, una de las obras que han obtenido un mayor éxito en los últimos años.
La iniciativa partió de las profesoras Diana Fernández y Eva Portela, del Departamento de Música, quienes convencieron a alumnos de cuarto de la ESO y de primero y segundo de Bachillerato para formar una peculiar compañía que interpretase esta pieza, que denuncia los excesos de la prensa sensacionalista.
Pero si el reto de cantar, bailar e interpretar era grande, no lo era menos el de contar con todo el equipamiento necesario para la función, del que carecían para hacerla posible. Eso no arredró a los jóvenes actores, que para poner en marcha su iniciativa confeccionaron por sí mismos los decorados y el vestuario con el que se pusieron sobre las tablas.
Otros profesores del instituto colaboraron en la actividad, ya que fue necesario grabar las canciones y las filmaciones que se proyectaron durante la representación para hacerla más atractiva. El resultado hizo posible convertir ayer a Arteixo en un nuevo Broadway, en el que los jóvenes estudiantes demostraron que con entusiasmo es posible afrontar cualquier reto que se plantee.
La obra fue representada previamente en el propio instituto ante los compañeros de los actores, que les ovacionaron sin descanso para premiar el esfuerzo aplicado durante las últimas semanas para hacer realidad esta iniciativa, poco habitual en los centros docentes.
