El regidor de Oleiros ha insistido siempre en que la implantación de la ORA en el municipio se realizaba para aumentar la "rotación" de vehículos y evitar que algunos los tuviesen todo el día aparcados en el mismo lugar. También negó siempre las acusaciones de la oposición de perseguir solo "hacer caja" con esta medida. Ayer, en su programa en la radio municipal, reconoció por primera vez que efectivamente el fin es económico.

"Es la forma de hacer algún dinero para hacer frente a los gastos en verano, sino tendría que sacárselo a otras cosas, caminos, restauración de casas. No se lo voy a sacar a educación, cultura o servicios sociales", declaró. Precisó que el Concello gasta unos 500.000 euros en la temporada de playas entre socorristas, limpieza y demás.