La Fiscalía solicita una pena de siete años y seis meses de prisión para el hombre que intentó matar con un hacha a la pareja de su exmujer en Vilarmaior, acusado de intento de homicidio y allanamiento de morada. El Ministerio Fiscal pide también que el acusado indemnice a la víctima con 1.200 euros por las lesiones y con 700 euros por las secuelas de la agresión. El Juzgado de Instrucción número 3 de Betanzos instruye el caso.
La agresión por la que la fiscal solicita una pena de cárcel se produjo en marzo de 2015. El acusado, J.M.V.F., condujo en su vehículo hasta las proximidades de la vivienda donde residía su exmujer, J.M.N.M., y la pareja de ésta, R.M.L.. La mujer no se encontraba en el domicilio. El agresor se coló por una ventana y "guiado por la intencionalidad de matar a R., esperó a que éste saliera del cuarto de baño y, sin mediar palabra, se abalanzó sobre él y comenzó a golpearle con el hacha en la zona izquierda de la cabeza, en los brazos y en las piernas, iniciándose acto seguido un forcejeo entre ambos en el transcurso del cual R. cayó al suelo, momento que aprovechó el acusado para pisar el cuello de su víctima e intentar cortarle la respiración, ante lo cual R. consiguió reaccionar propinando un empujón a su agresor para a continuación salir al exterior de la vivienda en busca de auxilio", relata la Fiscalía.
Las agresiones causaron a la víctima lesiones consistentes en "policontusiones, traumatismo craneoencefálico, contusión hemorrágica frontal izquierda, heridas inciso contusas en la cabeza, mano derecha y ambas piernas, y erosión de la cara lateral izquierda del cuello", detalla la fiscal.
En su escrito, sostiene que las lesiones requirieron puntos de sutura y vigilancia neurológica. La víctima permaneció hospitalizado durante 10 días y su recuperación requirió 17 días, según la fiscal. Las secuelas del ataque consisten en varias cicatrices en la cabeza, la cara y las piernas, apunta.
El acusado ha sido diagnosticado de un trastorno mixto ansioso-depresivo que "en el momento de los hechos afectó levemente a sus capacidades volitivas", señal el escrito. El agresor se encuentra en prisión provisional desde el 2 de abril de 2015. La agresión se había producido en marzo. Tras los hechos, el agresor se dio a la fuga. Para dar con él, la Guardia Civil desplegó un amplio dispositivo de búsqueda.
