El concello carralés se rige aún por las normas subsidiarias aprobadas en 1984 y revisadas en 1994. El Ayuntamiento obtuvo una subvención de la Xunta en 2004 para redactar el documento, que no adjudicó hasta 2011 a la empresa a Estudio Técnico Gallego.

La previsión pasaba por aprobar el PGOM en 2013, pero superado con creces ese plazo, el Concello todavía no ha dado luz verde inicial al documento. El Gobierno que preside el popular José Luis Fernández Mouriño atribuyó en más de una ocasión la demora en la elaboración del documento a los reiterados cambios en la ley de suelo. El Concello aprobó inicialmente el planeamiento en vísperas de la aprobación de la nueva normativa gallega, que obliga a los municipios que no hayan dado luz verde inicial al documento a comenzar la redacción de nuevo. El PGOM ha suscitado numerosas quejas de la oposición, que han cuestionado su legalidad.