A dos de ellos, la devoción por el Branco Lexítimo les viene de familia. Y al resto, sino de casta, sí de cepa. La tercera generación de Casa Rilo y Bodegas Beade y tres viticultores, dos de ellos creadores del vino Os dous de sempre, se han unido bajo una nueva marca de Branco Lexítimo, Conexión Mandeo.

Su primera añada, Alicerce, fue una de las principales novedades que ha deparado la tercera edición de la Mostra de Branco Lexítimo, la feria que se celebró ayer en Paderne y que aspira a consolidar esta variedad de vino, la más antigua de Galicia, cada vez más apreciada por su aroma y acidez.

Ángel Pedreira Vieiro, José Luis Bouzón Beade, Juan Naveira Presedo, Pablo Fernández Coroas y Ricardo Rilo Rodríguez son cinco emprendedores que el pasado invierno crearon Conexión Mandeo con el propósito de recuperar antiguas fincas de viñedos, cultivar vides y crear un nuevo vino.

Aspiran a lograr en los próximos cinco años una producción de 4.000 o incluso los 5.000 litros y exaltan la calidad de una variedad ancestral cuyas primeras cepas aparecieron en Paderne. Su objetivo es el mismo que persigue este pequeño concello rural que, en boca de su alcalde, el socialista César Longo, aprovechó ayer la apertura de la muestra para solicitar la colaboración de otras administraciones en el proceso de recuperación y consolidación del Branco Lexítimo.

La muestra reunió en Paderne a siete bodegas de la zona: Casa Beade, Bodegas Rilo, Eladio Migal, Codeseira, Adegas Lorenzo Bescansa, Viña Ártabra y Conexión Mandeo. Por primera vez, y como una muestra más de la unión de bodegueros, la feria contó también con la asistencia de cuatro bodegas de la comarca de Barbanza y Negueira de Muñiz (Saborido López, Entre Ríos, Panchín y Sidrón). Todos ellos unidos en la promoción de un vino que aspiran a convertir en un "motor" de sus respectivas áreas, un objetivo por el que brindaron ayer alcaldes y el presidente provincial.