El programa Galicia Birding califica el entorno del embalse de Cecebre y la ría de O Burgo como un "singular oasis ornitológico". La presa de Abegondo es uno de los enclaves más recomendados para gozar en otoño e invierno de la observación de patos, garzas, limícolas y zampullines. El embalse acoge una nutrida representación de aves acuáticas, sobre todo en migración e invernada. En el entorno del pantano, en la zona del molino de Peiraio y la aldea de Cecebre, es posible avistar aves de río y propias del bosque de ribera. La guía recomienda comenzar la ruta del embalse en la aldea de Crendes, donde puede avistarse al azor común o el gorrión molinero. En la denominada cola del río Mero es posible ver anátidas, gacetas grandes, águilas pescadoras o milanos negros. El itinerario proseguiría por Orto de Arriba hasta llegar a la cola del Barcés, enclave habitual del somormujo lavanco y de cormoranes grandes. Otro de los itinerarios que más aconseja la ría es el que parte del faro de Mera, recorre la Costa de Dexo y continúa por Bastiagueiro, Santa Cristina y el paseo marítimo de O Burgo. En esta ruta, la más próxima a A Coruña, pueden avistarse innumerables especies, desde cormoranes moñudos a gaviotas cabecinegras, argénteas, charranes y gaviones atlánticos.