El detenido por atropellar a un joven en Sada ha quedado en libertad con cargos. El arrestado, de unos treinta años y natural de Ourense, tendrá que personarse cada quince días en el juzgado y se enfrenta a cargos por tres delitos, lesiones, contra la seguridad del tráfico y omisión del deber de socorro. Sus tres acompañantes, dos hombres y una mujer, han quedado en libertad sin cargos tras prestar declaración en comisaría.
La víctima, un sadense de unos veinte años permanecía ayer ingresado en la unidad de observación en el Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña. Su pronóstico es menos grave y podría recibir el alta en breve. Según explicaron fuentes de su entorno, el joven tiene quemaduras en la espalda por la abrasión del asfalto, tuvo que ser atendido por golpes en la cabeza y puede que tenga someterse a un intervención quirúrgica en la nariz.
La investigación intenta aclarar los motivos que llevaron al conductor del coche a embestir al joven. Los hechos se registraron alrededor de las siete de la mañana del domingo en la calle de la Obra. Según informaron fuentes de la policía, las primeras llamadas de alerta se registraron a las 06.50 horas y requerían una patrulla para disolver una reyerta entre dos grupos en la que participaban alrededor de cuarenta personas. Cuando llegaron los agentes, se encontraron al joven herido ensangrentado en el suelo y a varios jóvenes que corrían detrás del supuesto autor del atropello.
El agresor fue arrestado en el entorno del restaurante El Náutico cuando intentaba burlar a la policía, esconder su coche y coger un taxi en compañía de otras tres personas. El detenido y sus acompañantes se resistieron y uno de ellos llegó a agredir a un agente. Otros integrantes del grupo huyeron en otro vehículo.
Los motivos que provocaron la pelea no han trascendido. El dueño de la discoteca ubicada en el entorno aclaró ayer que ya había cerrado sus puertas cuando comenzó la reyerta. Varios testigos afirman que el joven que resultó herido no participaba en la pelea y que fue embestido por el coche cuando iba a dar parte de un pequeño accidente en el que estaba implicado su vehículo.
La declaración del arrestado en los juzgados no ha trascendido de momento, pero al ser detenido manifestó no tener constancia de haber arrollado a nadie. La declaración del acusado, que dio positivo en alcohol y drogas, fue desmentida por testigos, que llegaron a afirmar que el atropello fue intencionado. El vehículo del detenido, que la Guardia Civil dejó inmovilizado en Sada, apareció ayer con las lunas rotas, supuestamente en represalia por lo acontecido.
Habrá que esperar a que se celebre la vista para despejar las incógnitas que rodean este suceso, que provocó conmoción en la zona. Varios vecinos instaban ayer a tomar medidas y reforzar la seguridad durante las fiestas patronales para que se repita un episodio de este tipo.
