El Concello de Cambre ha presentado alegaciones al proyecto de enlace entre la carretera CP-1706 con la autopista AP-9 en A Barcala, el denominado vial 17, para instar a la Xunta a retirar del texto las alusiones a la posible reinstalación de los peajes. El Gobierno local critica que el plan autonómico deje abierta la posibilidad a instalar nuevamente cabinas y cobrar por acceder a la autopista. "Esta infraestructura debe ser de acceso gratuito. De lo contrario el tráfico de la calle Tapia se mantendría y el vial no serviría", argumenta el Ayuntamiento cambrés en sus alegaciones.

La Xunta no ha informado en ningún momento sobre la posible reinstalación de los peajes. En este proyecto en fase de alegaciones se especifica que dichas cabinas "actualmente no son necesarias", pero deben tenerse en cuenta "al tratarse de una autopista de peaje concesionada" y para "cumplir la normativa". En otra página de este documento de inicio de la evaluación ambiental se reitera que se debe "garantizar la posibilidad de que se pudieren reinstalar las cabinas de peaje".

El Concello de Cambre ha alegado también contra el proyecto autonómico por el impacto de la actuación prevista en los ríos San Marcos y San Pedro. El Ejecutivo municipal se opone a que la nueva infraestructura, que deberá salvar un desnivel para conectar con la autopista, se eleve por encima de los ríos mediante un terraplén cerrado que canalizaría los caudales. En sus alegaciones, el Ayuntamiento cambrés incide en que el trazado afecta a los corredores ecológicos delimitados en el Plan de Ordenación do Litoral y propone construir un viaducto que deje ver la cuenca visual de los ríos y afecte lo menos posible a los caudales y al paisaje.

El Ejecutivo municipal acusa a la Xunta de incumplir la normativa al incluir una única alternativa para salvar el desnivel, en lugar de las tres preceptivas.

El Gobierno municipal cuestiona también que el proyecto solo analice el término municipal de Cambre y no el tramo que afecta a Oleiros y exige que ambos trayectos se sometan a la fase de evaluación ambiental.

"Se trata de un proyecto de vital importancia para el Concello y estamos a favor de que se lleve a cabo, siempre y cuando se respeten varias cuestiones que consideramos prioritarias", recalca ayer el Ayuntamiento en un comunicado.