La Diputación de A Coruña intenta vender por segunda vez dos parcelas que tiene en el polígono de Sabón, según anunció ayer a través del Boletín Oficial de Provincia (BOP). El organismo provincial ha optado por la modalidad de subasta para estos terrenos, que están muy próximos a la rotonda de Sabón. Se encuentran situados entre las avenidas de Finisterre y de la Diputación.

El precio de salida de la subasta es de 1,5 millones de euros (las dos parcelas se venden conjuntamente). Esta es la segunda vez que la Diputación saca a subasta estos terrenos de Sabón. En el mes de abril de 2015, con Diego Calvo al frente de la institución, lo intentó con un precio de salida de 2,5 millones de euros. La puja finalmente quedó desierta. Un año y medio después la Diputación intenta venderlas por 1,5 millones como mínimo, lo que supone una reducción del precio en un millón de euros.

Una de las parcelas es la que va desde el río Seixedo hasta un pequeño almacén (en medio hay un pequeño edificio de oficinas). Tiene una superficie aprovechable de 3.138 metros cuadrados. La otra es en la que está instalada la báscula que usan los camiones para pesarse. Esta mide 5.886 metros cuadrados. El plazo para presentar ofertas es de 19 días naturales, según indica la Diputación en el anuncio publicado ayer en el BOP.

El alcalde de Arteixo, Carlos Calvelo, asegura que el Ayuntamiento no se presentará a la subasta porque considera que no son útiles para el Concello. "No estamos interesados", afirma. También advierte de que las dos parcelas se encuentran afectadas por la posible ampliación de la avenida de la Diputación que estudian el Concello y la Xunta. La que está pegada al Seixedo además está afectada por la zona de seguridad que se debe dejar por ser zona inundable.

En una de las parcelas se encuentra ubicada la báscula de pesaje de camiones. Quien adquiera la parcela podrá disponer libremente de este aparato para desmontarlo o no. Carlos Calvelo explica que el Concello no instalará ninguna nueva báscula en el polígono de Sabón. "El principal uso de la báscula es del tráfico del puerto. Y allí tienen báscula", asegura el regidor. También señala que las propias empresas del polígono ya disponen de un sistema para controlar el peso de sus vehículos.

La Diputación se quedó con estas dos parcelas, además del almacén que tiene al lado, tras ceder la titularidad del polígono al Concello de Arteixo en un acuerdo que se firmó en 2014. El convenio permitió al Ayuntamiento quedarse con el embalse de Rexedoiro, el depósito de agua, las calles, zonas verdes, red de pluviales, abastecimiento y saneamiento y diez parcelas de suelo urbano.