La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo sigue con la lupa puesta sobre el saneamiento y los vertidos en la ría de O Burgo. El informe que redacta desde que inició su seguimiento sobre el estuario en 2010, anuncia a los peticionarios que "seguirá evaluando el segundo plan hidrológico de cuenca Galicia-Costa" y que "seguirá velando por la correcta aplicación por parte de España" de la normativa ambiental de la Unión Europea. Y es que, durante el análisis del primer ciclo del plan hidrológico detectó "deficiencias" que vigilará que se subsanen en la aplicación de este segundo tramo del plan.
En este documento, que recibió su aprobación el 8 de enero de este año y cuyo horizonte se sitúa en 2021, hay varias actuaciones previstas para la ría de O Burgo, entre ellas, mejoras en el saneamiento y la depuración. Para este fin, se prevé una inversión de más de seis millones de euros, desde 2016 hasta 2021, que podrá contar con una financiación del 57% de la Unión Europea. En el programa de medidas está también la regeneración integral del estuario, con un presupuesto aproximado de siete millones de euros y sin fondos procedentes de Bruselas.
El proyecto de saneamiento de A Pasaxe está paralizado, ya que el Ministerio de Medio Ambiente debía haber hecho público a mediados de julio el proyecto final de ejecución del dragado. Y es que, sobre el estudio que realizó el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex) se realizaron modificaciones y las partes involucradas en estas obras, como la Cofradía, la plataforma en defensa del estuario y los ayuntamientos de A Coruña, Oleiros, Cambre y Culleredo presentaron alegaciones a ese plan utilizado como base.
El Ministerio de Medio Ambiente tenía como fecha límite el 21 de julio para dar a conocer el resultado de la exposición pública de este proyecto, así como el texto definitivo, sin embargo, no lo hizo. El Ministerio de Medio Ambiente excusa la paralización de esta actuación diciendo que el Gobierno del Estado está en funciones, por lo que no puede ejecutarlo. Esta explicación no les vale a los trabajadores que dependen del saneamiento del estuario para que sus condiciones de vida mejoren y se escudan en que la decisión no es política y en que ya hay una partida presupuestaria para su puesta en marcha este año. Y es que, estando en funciones, el Ejecutivo del PP firmó la prórroga de Ence para seguir operando en la ría de Marín.
En su revisión del caso, la Comisión Europea explica cuáles han sido los pasos que ha seguido para controlar el cumplimiento de la normativa sobre el tratamiento de aguas residuales urbanas y de la Directiva marco sobre el agua. En ambos casos, según recuerda la Comisión, llevó a España ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea y vigila que se cumplan las sentencias, que obligan al Estado a aplicar las medidas establecidas en estos documentos. En el caso concreto de la ría de O Burgo, la Comisión asegura que las autoridades españolas presentaron "los resultados analíticos de los efluentes de la nueva depuradora de aguas residuales de A Coruña" y que la infraestructura cumple con los parámetros exigidos por la Unión Europea.
La Comisión admitió a trámite el 17 de noviembre de 2010 una solicitud presentada por el entonces patrón mayor de la Cofradía de Pescadores, Manuel Cao. En febrero de 2013, una delegación de la Comisión viajó a A Coruña para recorrer la ría de O Burgo y ver cómo estaba. La postura de la misión, sobre el terreno, fue muy dura con el Gobierno de España, aunque, el informe resultante de la visita no fue todo lo duro que los peticionarios esperaban. "La visita se arruinó con tanto político de aquí, su visión no era objetiva", llegó a decir la eurodiputada Tatjana Zdanoka.
