La Xunta abrió un expediente disciplinario a un médico de familia de un centro de salud de A Coruña por acceder un total de 149 veces a las historias clínicas de 61 pacientes que no eran de su cupo.

Uno de estos pacientes que no estaban en su cupo presentó una denuncia contra él en marzo de 2015 ante la Consellería de Sanidade y ante la Agencia Española de Protección de Datos porque aseguró que se veía afectada por la divulgación de sus datos médicos por parte de este facultativo, sin su consentimiento.

La mujer relató que este acceso a su historial se produjo tras imponérsele al médico una orden de alejamiento hacia ella y de protección cautelar por múltiples agresiones físicas y psíquicas prolongadas durante nueve meses de relación. Agregó que también se inmiscuía en los informes médicos de sus familiares.

La Xunta abrió expediente disciplinario al verificar estos accesos (Sanidade rechazó dar datos sobre su resolución para no revelar datos privados). Protección de Datos concluyó que la Xunta ya tomó medidas.