Arteixo sigue sin una ordenanza que regule las características de las terrazas de los bares en la vía pública tres años después de que el Gobierno local se comprometiese a crear una comisión para elaborar el texto. El alcalde, Carlos Calvelo, aseguró en 2013 que en dos o tres meses podría llevarse el texto a pleno. Este anuncio se ha repetido en más de una ocasión. La última fue en febrero de este año, cuando el portavoz del Ejecutivo municipal, José Ramón Amado, se comprometió en febrero a tener listo un borrador de la ordenanza en dos meses. El edil reconoció entonces que la regulación de las terrazas "empieza a tener urgencia" y que es un tema "complejo" de abordar. No ha habido más novedades.

El concejal de Urbanismo, Alberto Castro, anuncia que el Gobierno local llevará la nueva ordenanza de terrazas a pleno antes de finales de este año. "Previsiblemente en noviembre o diciembre", indica. También señala que la Policía Local inició la redacción del nuevo texto y el departamento de Urbanismo ha comenzado a revisarla. Castro explica que se trataba de un "documento de buenas intenciones pero que hay que darle una forma jurídica correcta".

Arteixo en la actualidad carece de una normativa que regule el tipo de terrazas que se pueden colocar y el espacio máximo que pueden ocupar. El Ayuntamiento solo dispone de una norma que fija los precios públicos por instalarlas en la calle. Los interesados en instalar una terraza deben presentar una instancia dirigida al alcalde. Entonces la Policía Local evalúa si la terraza molesta a los peatones y a los vehículos. La concejalía de Urbanismo y la de Obras también deben emitir un informe técnico. Si los supera la terraza podrá instalarse. La tarifa mínima que aplica el Concello a los locales de hostelería es de 22,62 euros cada mes. La tasa se fija por los metros cuadrados que ocupa la terraza.

La nueva ordenanza regulará las características de las terrazas. El concejal de Urbanismo, Alberto Castro, destaca que marcará "las líneas rojas" que no se podrán superar. "Debe predominar el vidrio, ser diáfana, contar con un techo desmontable, una barandilla y tener elementos ligeros", afirma el edil. La intención del Gobierno local es que las terrazas "no llamen la atención" y que estén "integradas", según relata Alberto Castro. El texto también recogerá las sanciones por no cumplir las exigencias de la ordenanza.

El PSOE ha sido uno de los grupos de la oposición que más ha insistido en reclamar la elaboración de la ordenanza de terrazas. El BNG también ha denunciado algunas terrazas que invaden la calzada y dificultan el paso de peatones por las aceras.