El planeamiento se mantiene entre las asignaturas pendientes de la comarca coruñesa. Un tercio de los miembros del Consorcio As Mariñas reiniciarán ahora sus normas urbanísticas, mientras que otros tramitan sus proyectos y solo Oleiros tiene su Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) en vigor y sin problemas.

Cambre ha sido el último en confirmar que rescindirá el contrato a la empresa redactora, la UTE formada por Idom y Arnáiz, tras años de retrasos y después de que la empresa presentara la documentación incompleta y fuera de plazo y rechazara el ultimátum que le dio el Concello el pasado mes de febrero para que entregara los documentos completos, corregidos y actualizados a la nueva ley. La redactora reclamó más dinero y tiempo para ajustar el plan a la nueva normativa gallega y el Ayuntamiento replicó que estaba obligada por contrato a hacerlo sin coste añadido para el Concello. Para dirimir dudas, el Gobierno local remitió el caso al Consello Consultivo, que acaba de dar la razón al Ayuntamiento. El Ejecutivo municipal prevé ahora recabar los informes para notificar al Consultivo la resolución del contrato, adjudicado en diciembre de 2010, e iniciar la contratación de otra empresa.

En Arteixo, los dos intentos de plan general -uno con Manuel Pose en la alcaldía y otro en el mandato de Pilar Souto- se quedaron en el cajón. El popular Carlos Calvelo, que llegó a la Alcaldía en 2011, rechazó el trabajo que había quedado pendiente de aprobación inicial con Souto y no dio más pasos en la materia hasta que a finales del mes pasado el concejal del departamento urbanístico, Alberto Castro, afirmó que las bases para contratar la redacción del plan general están "a punto" ya que, aseguró: "Es el momento de empezar a trabajar el urbanismo".

En Betanzos, la Corporación local prevé reiniciar la redacción del plan general después de que la oposición tumbara en pleno en marzo la aprobación inicial del documento, que habría que reajustar casi por completo para adaptarlo a la nueva ley de suelo. Además, en abril los grupos aprobaron por unanimidad una moción de Betanzos Novo para iniciar de nuevo la redacción, aunque el alcalde, Ramón García, advirtió de que antes hay que estudiar la situación jurídica.

En Culleredo, el Concello ajusta el documento a los informes de organismos como AENA para llevar a pleno la aprobación provisional. En Bergondo, el plan general sigue pendiente de aprobación inicial y en Sada, de aprobación definitiva. En Carral, el Gobierno local aprobó en solitario el documento de forma inicial con la oposición en contra. Abegondo aguarda a que la justicia se pronuncie sobre un recurso a la sentencia del Tribunal Superior que anuló el plan.