El Ayuntamiento de Cambre negocia desde el verano pasado con los descendientes del que fue alcalde de A Coruña Alfonso Molina Brandao para expropiarles una parte de Villa Molina, una propiedad frente a la Casa Consistorial, con el fin de obtener un espacio más de aparcamiento en este entorno. A pesar de estas conversaciones, al Concello ahora le ha resultado imposible hacerle llegar una notificación a los propietarios, la resolución del concejal de Urbanismo que ordena los titulares que procedan a la demolición de las ruinas existentes en una de las parcelas de la propiedad.

El Concello ha intentado notificarles la declaración de ruina de unas antiguas edificaciones en la calle Rocón y no lo ha logrado. La resolución municipal les da un plazo de un mes para que soliciten licencia con el fin de echar abajo estas viejas ruinas y para que presenten el proyecto básico de demolición. Después del derribo tendrán dos meses de plazo para realizar el desbroce del terreno y su acondicionamiento.

En caso de que los dueños no acaten esta orden el Ejecutivo local procederá a la ejecución subsidiaria de los trabajos y luego les pasará la factura, o bien instará la ejecución forzosa mediante la imposición de multas coercitivas de 1.00 a 10.000 euros, reiterables hasta conseguir la demolición. Los propietarios tienen un mes de plazo para presentar un recurso de reposición contra esta resolución judicial y dos meses en caso de optar directamente por la vía contencioso-administrativa.

El alcalde Alfonso Molina pasó parte de su infancia en esta propiedad en el centro de Cambre. Dentro del recinto amurallado existe una parcela que es la que tiene estas ruinas pero al otro lado, por la calle Wenceslao Fernández Flórez, está la otra vivienda y un gran almacén, que son de 1930 pero que fueron reformados totalmente en 2012 (suma casi 3.000 metros cuadrados).

Desbroce

El Concello en 2014 ya inició un expediente sancionador porque los propietarios no acometieron el desbroce de la finca (tras ser advertidos en 2005), aunque al final acometieron los trabajos.

El Ayuntamiento cambrés inició un expediente para valorar la enajenación de este solar donde están las ruinas, que tiene 691 metros cuadrados según el catastro.

Este suelo urbano está catalogado como zona dotacional en las normas subsidiarias de planeamiento por lo que no se podría edificar en él según explicó en su día el concejal de Urbanismo Juan Leirós.

El Ejecutivo municipal de Cambre quiere destinar este espacio a uso público, en principio un aparcamiento.