Los propietarios de una vivienda sin licencia situada en el sector ZV-10 de zona verde de Bastiagueiriño, en el que el Concello prevé ejecutar una expropiación forzosa, han llegado a un acuerdo por el que cederán la vivienda al Ayuntamiento a cambio de poder vivir en ella cinco años más. El inmueble no tenía derecho al cobro de un justiprecio por la expropiación debido a que es ilegal y sus dueños han firmado que renunciarán al justiprecio correspondiente por los terrenos, que cederán transcurrido un lustro desde la fecha de levantamiento del acta de ocupación para la expropiación, prevista para el próximo día 6 de febrero, previo pago de los justiprecios el día 1. El acuerdo se llevará al próximo pleno tras plantearse a los grupos municipales en comisión informativa el pasado viernes, fuera del orden del día.
Los dueños de la finca presentaron un escrito el pasado día 12 de este mes para proponer al Concello la donación de la parcela a cambio de poder continuar en su vivienda cinco años más. Los servicios urbanísticos del Ayuntamiento dictan que "procede" adoptar el acuerdo y recogen que el periodo de cinco años es el previsto para "completar, sanear, ajardinar y dotar a los terrenos de senderos que faciliten el acceso peatonal al borde de contacto con la costa".
La vivienda a la que se refiere el acuerdo es de planta baja, de 101 metros cuadrados y solo cuenta con licencia para 15 metros cuadrados, por lo que el resto no se ajusta a la legalidad urbanística, señalan los informes municipales. Añaden que "las fotografías ponen de manifiesto la adaptación de la edificación a vivienda unifamiliar y el uso de la misma por sus titulares".
El Concello inició el pasado mes de julio el proceso para expropiar cerca de cuarenta parcelas situadas entre la calle Os Fieitos y el mar, en Bastiagueiriño, entre protestas de vecinos por "trato desigual". Denunciaban que varios chalés de la "milla de oro" no se tocarán.
El Ayuntamiento cifró en alrededor de 402.550 euros el coste que supondrá ocupar la superficie prevista, de 54.532 metros cuadrados, que se prevé convertir en un parque que dé continuidad al de As Galeras.
