La falta de efectivos de Policía Local en Sada ha sido motivo recurrente de queja en los últimos años. Las bajas, el pase a segunda actividad o la situación de incapacidad de algunos agentes ha agravado la situación del cuerpo, que se ha visto obligado a realizar turnos con un solo efectivo o, incluso, a prescindir de patrulla nocturna.

El CSI-F, el sindicato que representa a la mayor parte del cuerpo, denuncia que la precariedad de efectivos se remonta a 2010 y exige agilidad en la contratación de nuevos agentes. De los 22 de los que disponía Sada hace diez años quedan 19 y a día de hoy solo patrulla unos diez. Y es que, según ha podido saber este diario, la situación se ha agravado con el pase a segunda actividad de un oficial, la baja de cuatro efectivos y la situación de incapacidad permanente de otros tres. Actualmente son en torno a diez los que trabajan la calle y, entre vacaciones y permisos, hay días en que solo hay ocho agentes para tres turnos, con lo que es imposible que se cubran todas las horas con dos efectivos como marca el reglamento.

El Concello anunció en 2015 la convocatoria de dos plazas, una de oficial y otra de agente, pero todavía no han salido a contratación. La demora ha avivado el malestar de la plantilla que, a través de su sindicato, ha exigido agilidad y que advierte ya que dos plazas no son suficientes. Y es que todo apunta a que la situación podría agravarse. Si se aprueba la jubilación anticipada de los policías a los sesenta años, Sada perdería más agentes, sin que el recambio esté garantizado. El alcalde, Benito Portela, ha solicitado la intercesión de la Fegamp para forzar a que se articulen medidas que agilicen las contrataciones de las plazas vacantes.

Los últimos gobiernos municipales han recurrido a diversas medidas para intentar paliar la merma de agentes. Durante el mandato del PP, el Concello optó por compensar las horas extra con días libres, lo que a la postre derivó en una mayor insuficiencia de efectivos. El actual Gobierno local ha intentado cuadrar los turnos con pagos de horas extra, una solución que le ha valido las críticas del PP por el coste.

La oleada de robos en viviendas de 2015 avivó las quejas vecinales por la falta de efectivos, tanto de la Policía como de la Guardia Civil, que atiende también los municipios del entorno.

Desde el sindicato no solo critican la estrechez de medios personales, sino también de recursos. El CSIF critica la precariedad del material, especialmente los vehículos que, sostiene, tienen que pasar cada vez con más frecuencia por el taller por su antigüedad.