Grupos de cinco contenedores pequeños y con indicadores claros. Ese es el modelo que utiliza el municipio catalán de Vila-seca y en el que se ha fijado el Concello de Arteixo, que estudia implantarlo cuando empiece a gestionar el servicio de basuras tras decidir abandonar el Consorcio As Mariñas. Para el concejal de Obras y Servicios Municipales de Arteixo, José Ramón Amado, este método es un "referente", según indicó ayer en una jornada en la que representantes del concello catalán y de Allariz explicaron sus modelos para el servicio de residuos.

Vila-seca es un municipio de 22.000 habitantes de la provincia de Tarragona que ha conseguido con este sistema que su tasa de reciclaje (cantidad de residuos reutilizados) se triplicase. Pasó de un 17% en 2008 a un 52% en 2016, según explicó la concejal de Servicios al Territorio y Educación de Vila-seca, Manuela Moya, en la jornada de ayer. Arteixo tiene una tasa de reciclaje que ronda el 9%. ¿El motivo del éxito de Vila-seca? En 2009 instalaron un nuevo sistema de cinco contenedores con indicadores. El más novedoso que se colocó fue uno destinado a envases ligeros.

La concejal del concello catalán destacó que el Ayuntamiento decidió modificar el sistema de los contenedores y empezó a estudiarlo en 2005. Hasta ese momento este municipio catalán tenía un sistema de contenedores similar al que tiene Arteixo actualmente. "Hicimos un estudio de todos los contenedores de 2005 a 2008. La opinión imperante era que pusiéramos los soterrados", recordó Moya. No lo hicieron. Optaron por el sistema bilateral EASY, con el cual se instalan grupos de cinco contenedores pequeños: vidrio, papel, cartón, orgánico y el resto de basura. Estos depósitos están anclados a la calle y solo es necesario un operario que conduzca un camión para vaciarlos, ya que puede manejar una grúa que tiene el vehículo con la que se sujeta el contenedor y se vacía.

Los técnicos de Vila-seca analizaron previamente los diferentes modelos de contenedores: de carga trasera, lateral, soterrados, el método del puerta a puerta y el sistema bilateral EASY, según relató la concejal del municipio de Tarragona.

En la jornada también participó un técnico del departamento de Medio Ambiente del Concello de Allariz, Xosé Manuel Romero, que explicó que el Gobierno local se propuso en 2015 cambiar el modelo del servicio de basuras. Este municipio de la provincia de Ourense tiene unos 6.000 habitantes y cuenta con 25 composteros comunitarios para depositar la materia orgánica. El Concello entregó un pequeño depósito a los vecinos para transportar la materia orgánica a los puntos habilitados. El técnico afirmó que "la gente está participando bien en el compostaje comunitario". El Ejecutivo de Allariz también repartió folletos con los que informó a los vecinos qué tipo de residuos hay que depositar en cada contenedor.

Vila-seca y Allariz comparten el método del puerta a puerta para recoger los residuos generados por los comercios. Operarios municipales recorren los establecimientos para llevarse la basura, que debe guardarse en el interior del local. Lo que no pueden hacer los negocios es utilizar los contenedores normales, que están destinados a los vecinos. El Concello de Arteixo pretende poner en marcha este método de retirada de residuos en los diferentes negocios del municipio, según explicaron el concejal de Obras y el alcalde hace unas semanas.