La Junta de Gobierno Local de Arteixo dio luz verde ayer a iniciar el proceso para contratar las obras para construir una nueva acera entre los núcleos rurales de Marciñado y Ervedíns, en la parroquia de Loureda. La longitud de esta nueva senda será de 500 metros y su coste rondará los 300.000 euros. El Gobierno local destaca que esta nueva obra pondrá fin a la "peligrosidad" que sufren los viandantes en esta carretera, que no cuenta con arcenes en ninguno de los márgenes.

El proyecto que ejecutará el Concello también incluye la construcción de una red de recogida de aguas pluviales. La carretera actualmente no cuenta con este sistema. El Ejecutivo municipal también señala que "dado que el terreno presenta fuertes desniveles" deberá construir "muros de contención" con el fin de "garantizar la seguridad de los viandantes". También será necesario desplazar las redes de electricidad y de telefonía.