Un juzgado ha aplazado de manera provisional el desahucio de una familia en Sada mientras los deudores buscan una solución con el Banco Popular, al que el alcalde de la localidad, Benito Portela, exige que "entre en razón". Más de medio centenar de personas se concentraron ayer ante una céntrica oficina de esta entidad bancaria en A Coruña, donde han gritado numerosas consignas tras la pancarta Ni casas sin gente, ni gente sin casas, de la plataforma convocante, Stop Desahucios.

Antonio Vázquez, abogado de esta entidad, explicó que el desahucio, programado para este viernes 9 de junio, queda, de momento, pospuesto tras la nueva ley de protección de deudores hipotecarios que incluye una moratoria hasta mayo de 2020 en casos de personas con vulnerabilidad social. Mientras se resuelve este proceso en el juzgado, la familia mantiene contactos con el banco para llegar a una solución definitiva.

El BNG mostró su solidaridad con la familia y anunció que llevará al próximo pleno una moción para instar al Gobierno central a hacer una reforma legislativa para estos casos.