El patronato de la Fundación Paz y González ha accedido a la petición formulada por el Concello de Oleiros y ha liberado las partidas económicas pendientes de los años 2014, 2015 y 2016. Los fondos ascienden en total a 95.689 euros que se repartirán entre los vecinos con menos recursos de la parroquia de Iñás.

Los fondos proceden de la alquería de Torralba (Ávila), una extensa propiedad de 347 hectáreas que fue propiedad de Vicenta Paz y González, una vecina de la comarca que dejó escrito en su testamento en 1904 que donaba esta finca para explotarla y repartir los beneficios entre las personas más necesitadas de las parroquias de Iñás, en Oleiros, y de Almeiras, en Culleredo. El testamento dejaba al frente del patronato al alcalde de A Coruña y los terratenientes de Almeiras e Iñás.

Con el paso de los años, el Concello de A Coruña se olvidó de esta dehesa y en 1999 decidió recuperarla, un propósito por el que tuvo que pleitear con los antiguos arrendatarios, que se negaban a abandonarla. En 2003, el juzgado de Arévalo sentenció la devolución de la alquería a A Coruña y en 2004 el Concello la sacó a subasta por 30.000 euros.

De la renta anual que obtiene por la explotación, el patronato dedica el 30% a gastos de administración y el 70% restante a acciones a favor de los desfavorecidos de Iñás y Almeiras.

Durante los últimos años, el Concello de Oleiros criticó en más de una ocasión retrasos en los ingresos. Según informaron ayer desde el Gobierno local, la comunicación recibida del patronato de la Fundación Paz y González indica cómo deben tramitarse las ayudas a través de Servizos Sociais Comunitarios, en función de las bases aprobadas en 2014 a instancia del Concello de Oleiros.

El Ayuntamiento informó ayer que todos los residentes en Iñás que quieran recibir información sobre las ayudas pueden solicitar a partir de una cita con la trabajadora social en las dependencias de Servizos Sociais, que les informará de los criterios que deben cumplir. Desde el Gobierno local detallan que el objetivo de las ayudas es cubrir necesidades básicas como arreglos imprescindibles en la vivienda habitual, el pago del alquiler, compra de equipamientos básicos o la educación de los menores.