Gas Natural-Unión Fenosa quiso cobrarle 11.700 euros a un vecino por apartarle de la fachada de casa los cables de la luz, situación ante la que el Concello decidió sacarlos por su cuenta, gratis, ya que necesitaba demoler esa vivienda y la anexa, en ruinas y con peligro de desprendimiento de cascotes sobre la acera de la calle Francisca Herrera en la capital municipal. Siete meses después, las casas se derribaron pero los cables siguen colgando de dos postes clavados en un gran bloque de hormigón en medio de la acera.
Uno de los postes está justo delante del edificio de Hacienda y Recaudación que acaba de estrenar el Concello. Estos postes con las bases de hormigón reducen el paso por la acera al mínimo, no cabe una silla de ruedas. Ante esta situación y la larga espera, el alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, anunció ayer que va a sancionar económicamente a Fenosa si no retira estos postes y soterra los cables eléctricos.
El Concello amenaza con multas de 1.000 euros cada tres meses a Fenosa hasta que entierre los cables. García Seoane expuso que el Concello "ya tiene canalizado en toda esa calle, gratis, todo el cableado". Recordó que la compañía eléctrica "está obligada a soterrar los cables en suelo urbano".
El alcalde también anunció ayer que está a punto de salir a licitación la retirada de los tanques y descontaminación del subsuelo de la demolida gasolinera de Santa Cruz. Estimó que las obras comenzarán "a partir de agosto".
