El pleno de Sada dejó ayer sobre la mesa la ordenanza de protección de los animales y de convivencia responsable. El alcalde, Benito Portela, defendió aplazar el debate para recoger más sugerencias de colectivos y vecinos tras recibir "numerosas" llamadas de personas interesadas en participar en el debate. "Nos sorprendieron las aportaciones de mucha gente que desconocía que estábamos tramitando esta norma", sostuvo Portela, que anunció la próxima convocatoria de un consejo sectorial específico para abordar mejoras en la normativa.

El Gobierno local defendió también que era preferible dejarla sobre la mesa para evitar incongruencias con la ley gallega, en trámite parlamentario.

Todos los grupos se mostraron conformes con dejar la ordenanza sobre la mesa, aunque el PP aprovechó para reprochar al alcalde su "improvisación". Ernesto Anido criticó que se elevase la ordenanza a pleno sin los correspondientes informes técnicos y acusó al Ejecutivo de actuar a "golpe de redes sociales". El vinculó la urgencia en elevar la normativa a pleno con la preocupación que ha generado el envenenamiento de un perro en el paseo marítimo. "Es una prueba de la improvisación. Le importa poco o nada la problemática de fondo, solo el titular de prensa", censuró.

Benito Portela se defendió de las críticas de improvisación y recordó que la aprobación de esta normativa ya estaba incluida en la planificación de la que se había dado cuenta al pleno hace meses.