Julianna Friezziero tiene 22 años y es de Padua, una ciudad del norte de Italia. Estudia Ingenería en Milán y se unió al proyecto betanceiro a través de Legambiente, una asociación italiana que, en su página web, reúne campos de trabajo medioambiental de toda Europa.

La joven se define como una "enamorada de la naturaleza" a la que le encanta "pasar tiempo en la montaña y en el bosque". Este es el primer campo de trabajo medioambiental al que acude y dice que está enormemente emocionada porque la naturaleza siempre le ha interesado mucho y que le gusta trabajar duro. "El cuidado de la naturaleza, siempre es la mejor opción cuando tienes tiempo libre", añade.

"No sé cual será la sensación final, pero soy positiva y espero volver a casa satisfecha después de todo el trabajo que se desarrolla aquí", declara la italiana.