El cuerpo del octogenario desaparecido el 26 de julio en el municipio de Curtis, Ramón Barral, apareció ayer por la mañana a dos kilómetros de su casa, en la parroquia de Fisteus.

El cadáver fue encontrado por un vecino de la zona y al lugar se trasladó la Policía Judicial de Betanzos para proceder a su levantamiento.

El octogenario residía en A Coruña y había acudido a Curtis a pasar unos días con su familia a una vivienda de A Fraga en Fisteus. En Betanzos prosigue la búsqueda de Antonio Pena, de 78 años, que falta de su casa desde el pasado sábado.