El alcalde de Culleredo, Julio Sacristán, se reunirá el próximo día 15 con responsables de Autopistas del Atlántico y con el equipo redactor del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) para "demandar medidas que palíen la afección por ruido" que causa la AP-9 al discurrir en paralelo a la rúa Xafonte y otras adyacentes en Vilaboa, donde hay casas a incluso menos de quince metros de esta infraestructura.

Los vecinos de esta zona reclamaron a las administraciones que tomasen medidas después de sufrir el insoportable ruido del tráfico de la autopista al lado de sus casas y exigir la instalación de pantallas acústicas como sí se han colocado en otros lugares. El elevado nivel de ruido de la autopista en esta zona ya fue advertido por la propia Xunta, que en su informe sobre el PXOM de Culleredo advirtió contra la previsión de una urbanización en este entorno, en la zona de A Carballeira.

Sacristán asegura que solicitará a Autopistas que tome "medidas para que los residentes vieran minimizado el impacto por el ruido". El regidor considera que si con el aeropuerto se minimizó el ruido "con la autopista se tiene que conseguir lo mismo". Recordó que estos vecinos ya se vieron afectados por la construcción de la AP-9 y se debe garantizar "sí o sí" que no tengan molestias por el ruido y que puedan desarrollar sus terrenos". Los afectados ya expusieron el problema hace un mes al teniente de alcalde.