El alcalde de Oleiros anunció el pasado mes de abril que este verano estarían instaladas las treinta marquesinas de diseño propio que sustituirían a las actuales, viejas, con pintadas, llenas de papeles o rotas, por todo el municipio. Sin embargo, ha pasado el verano y ni siquiera se ha sacado a contratación la obra. El regidor, Ángel García Seoane, reconoció ayer que se había producido una demora y que se debía a "problemas burocráticos", aunque no adelantó ninguna fecha próxima para realizar esta adjudicación.

El presupuesto de este año contaba con una partida de 30.000 euros para iniciar el plan de renovación de marquesinas en Oleiros, para instalar unas nuevas con diseño original del Concello, una estructura con un pie metálico y encima una cubierta ondulada, sin paredes, para que fuese imposible romperle los cristales o hacerle pintadas. Por lo tanto, sin estructura que proteja del viento y la lluvia a los usuarios de las paradas de autobús.

Un mes después de anunciar que se iban a renovar las marquesinas, sin embargo, el Concello tuvo que echar mano de la partida de 30.000 euros reservada para las marquesinas (entre otras) para cumplir una sentencia que elevó un 409% el valor de unas fincas expropiadas a dos vecinas para ejecutar la mejora de la playa de Naval, en total unos 200.000 euros.

En la noche del pasado lunes aparecieron rotos los cristales de una marquesina en el lugar de A Pereira en Serantes, hecho que fue denunciado al Concello, que envió allí a operarios para sustituir los cristales.