Perillo y Santa Cruz pueden convertirse en un auténtico caos de tráfico en los próximos meses con efectos que se podrían notar también en A Coruña si no son un éxito los cambios de sentido, cortes de tráfico, desvíos y otras medidas que se tomarán a finales de este mes ante el inicio de una importante obra, el sifón que aliviará los bombeos de la ría de O Burgo, y que se ejecutará en una de las vías de mayor circulación de Galicia, la AC-173 que une Perillo y Mera. El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, anunció ayer algunas de estas medidas y la más destacada es que se eliminarán los semáforos del cruce de Sol y Mar en la N-VI (solo quedará uno para peatones) y en su lugar se pintará una rotonda.

Esta glorieta impedirá al tráfico procedente de A Coruña y que quiera dirigirse hacia Montrove y Sada, girar en esta rotonda pintada en el suelo hacia la izquierda para subir por la rúa Areal e ir a Montrove y Sada. Tendrán que continuar por la N-VI hasta el cambio de sentido que está a la altura de las instalaciones de Tráfico de la Guardia Civil y volver atrás, o seguir hasta la rotonda de O Seixal y hacer allí el cambio de sentido.

Otra importante modificación del tráfico se producirá en la avenida Ché Guevara, la AC-173, porque las obras del sifón se ejecutarán entre la rotonda de Nirvana y A Pasaxe. El carril en dirección a A Coruña desde la rotonda del Ché hasta la de Santa Cristina se cortará por tramos de cien metros y el tráfico circulará por turnos, regulados por semáforos de obra, mientras que el otro carril estará libre, con prioridad hacia Santa Cruz.

El regidor explicó hoy que recomendaba a los vecinos de la zona norte del municipio (Maianca, Dexo, Lorbé, Serantes), coger la vía ártabra para evitar pasar por Perillo. No obstante los residentes en Dorneda, SAnta Cruz y Bastiagueiro también podrán ir a la rotonda del Ché y ahí coger hacia el Alto de Perillo por la rúa Miradoiro y bajar por la Segunda República, coger la rúa da Barreira hacia la avenida Rosalía e incorporarse al puente de A Pasaxe tras hacer la rotonda en Santa Cristina.

En sentido contrario, los vehículos procedentes de A Coruña podrán ir hacia Santa Cruz y Mera pasando por la rotonda de Santa Cristina pero desviándose poco después, a la altura del hotel Brial, por la Corredoira das Viñas hasta la calle de la piscina, que cambiará de sentido, siguiendo después por la rúa Miradoiro y de ahí a la rotonda del Ché.

La ejecución de esta obra coincidirá en el tiempo con los trabajos de retirada de los tanques subterráneos de la zona donde estaba la gasolinera de Santa Cruz, y el inicio de las obras de la glorieta que se iniciarán en este mismo terreno a partir del próximo mes de enero. A esto se suma otra obra que hoy anunció Seoane que se iba a aprovechar para ejecutar también de forma simultánea: romper toda la acera desde Coruxo hasta el Preludio en Santa Cruz para instalar unas nuevas tuberías de suministro de agua, dada la antigüedad de las actuales.

Si se comprueba que todas estas medidas y señales informativas que se colocarán por todas partes no funcionan y causan grandes atascos, se revisarán. El alcalde informará a los vecinos de Perillo de estos cambios en una asamblea el lunes que viene en As Torres de Santa Cruz y el miércoles en A Fábrica de Perillo.

La obra del sifón tiene un plazo de ejecución de un año pero Seoane asegura que tiene que estar lista "en seis meses".