No será la gran obra que prometió para este año el Ministerio de Fomento, con un paso subterráneo y una gran glorieta encima, pero servirá para comprobar si mejorará el tráfico en el cruce de Sol y Mar cuando efectivamente se haga esta obra: a finales de este mes se pintará en esta intersección, en el suelo, una rotonda, y se eliminarán los semáforos actuales, excepto el del paso de peatones. Es una de las principales medidas acordadas entre las administraciones (Ministerio de Fomento, Xunta y Concello) para tratar de evitar que la ejecución de la obra del sifón cause macro-atascos todos los días en una zona ya muy colapsada.

La ejecución de la obra del sifón coincide con la construcción de la glorieta en el cruce de Santa Cruz y en esta localidad también se va a realizar simultáneamente el levantamiento de toda la acera de una margen de la avenida desde Coruxo hasta el Preludio para instalar una nueva tubería de abastecimiento de agua debido a la antigüedad de la actual que produce muchas roturas y averías. Estas tres obras al mismo tiempo en una de las carreteras de mayor densidad de tráfico de Galicia pueden generar unos terribles atascos desde Oleiros hasta A Coruña, razón por la que se han ido cambiando las medidas a aplicar para evitarlo, tras negociar entre las tres administraciones y también con la empresa que realizará las obras.

El propio alcalde, Ángel García Seoane, reconoció ayer al presentar estas modificaciones de circulación, que "Santa Cruz estará colapsada" por estas tres obras simultáneas, pero espera que con los desvíos y cortes programados no sucede así. Probablemente en los últimos días de este mes se coloquen ya todas las señales informativas de estos cambios y desvíos además de que los primeros días habrá policías informando y regulando el tráfico.

El pintado de esta rotonda se acompañará con señales de velocidad máxima a 30 kilómetros por hora y los peatones tendrán que pulsar el botón para cruzar la AC-12, antes Nacional VI. Los vehículos procedentes de A Coruña y que hasta ahora en el cruce de Sol y Mar giraban a la izquierda para ir hacia Montrove y Sada, a partir de finales de este mes tendrán que seguir hasta el cambio de sentido que se puede hacer ante las instalaciones de Tráfico de la Guardia Civil, y volver hacia atrás para coger el carril hacia Montrove. O también podrán continuar unos metros más y hacer el cambio de sentido en la rotonda de O Seixal.

Otro gran cambio de tráfico que se producirá debido a la instalación de una tubería de un metro de diámetro bajo la acera desde la rotonda de Nirvana hasta A Pasaxe para aliviar los bombeos de la ría de O Burgo afectará a la avenida Che Guevara, con tráfico a tope en las horas puntas. El carril derecho en dirección A Coruña es el que se ocupará para poner la tubería por lo que tendrá cortes de tráfico en tramos de cien metros, regulados por semáforos de obra para permitir el paso de los vehículos de ambos sentidos por turnos. El carril izquierdo quedará abierto y se dará prioridad al tráfico hacia Santa Cruz.

García Seoane recomendó ayer que los vecinos de la zona norte del municipio (Dexo, Lorbé, Serantes, Maianca) opten por coger la vía ártabra en Mera o en Os Galgos para ir a la N-VI (en O Carballo ya no hay tanto atasco).

Los vecinos de la parte baja de Dorneda, Santa Cruz y Bastiagueiro, sin embargo, pueden ir hasta la rotonda del Che para dirigirse hacia A Coruña, y una vez ahí coger por la Rúa Miradoiro hacia el Alto de Perillo (en lugar de coger hacia Santa Cristina), bajar por la Segunda República y después girar a la derecha para coger la rúa da Barreira que conduce hasta la rotonda de Santa Cristina y ahí cambiar el sentido e ir a A Coruña.

En sentido contrario, para regresar desde A Coruña a Santa Cruz, irán a la rotonda de Santa Cristina y a los pocos metros deberán desviarse a la derecha por la Corredoira das Viñas hacia el Alto de Perillo y en la calle de la Piscina (que cambiará de sentido), coger la rúa Miradoiro hasta la rotonda del Che.

La obra del sifón tiene un plazo de un año pero el alcalde afirmó que "no puede durar más de seis meses, hasta mayo," porque sino en verano sí que podría haber más problemas.