La supresión del peaje de Pastoriza vuelve a caer en saco roto. El Ministerio de Medio Ambiente no ha escuchado las peticiones de los grupos políticos de Arteixo y ha dado luz verde a que Fomento construya la prolongación del acceso al puerto de Langosteira, un vial de 2,9 kilómetros que unirá la autovía de la dársena exterior con la tercera ronda y que tiene un coste estimado de 32 millones de euros. Toda la Corporación de Arteixo reclamó a Fomento que desistiese de esta iniciativa y que invirtiese los fondos previstos para esta obra en la liberalización del peaje de Pastoriza. La Dirección General de Carreteras envió en 2015 el proyecto al Ministerio de Medio Ambiente para que emitiese la declaración de impacto ambiental, que finalmente ha salido favorable.

El Concello incluso realizó una marcha en julio del año pasado para exigir al Gobierno central que asumiese el coste de la supresión del peaje de Pastoriza después de conocer que Fomento mantenía su intención de construir la prolongación del acceso a Langosteira. Una caravana de unos cuatro kilómetros de largo formada por 270 vehículos recorrió el acceso al puerto exterior de Langosteira por completo.

La protesta estuvo encabezada por el alcalde, Carlos Calvelo, que convocó la protesta debido a que Fomento debe abonar una indemnización, conocida como peaje en sombra, a Autoestradas de Galicia (concesionaria de la AG-55) por cada uno de los vehículos que utiliza el acceso a la dársena de Langosteira. En cambio, no asume el peaje entre A Coruña y Arteixo para el resto de conductores de la AG-55.

El Ayuntamiento Arteixo decidió convocar la protesta para reclamar la supresión del peaje de Pastoriza después de que el 7 de junio de 2016 (pocas semanas antes de que se celebrasen las elecciones generales) Fomento abriese el nuevo vial de acceso a Langosteira sin escuchar la petición aprobada en el pleno por todos los grupos de la Corporación local -PP, PSOE, BNG y TeGa-, que exigieron que se abordarse la eliminación del pago entre A Coruña y Arteixo.

Toda la Corporación de Arteixo aprobó en abril del año pasado una declaración institucional contra la decisión de Fomento de construir la prolongación del acceso a Langosteira y no suprimir el peaje de Pastoriza, en la AG-55. El texto fue aprobado por unanimidad por los cuatro grupos que forman la Corporación. El texto advertía de que el Concello presentaría una denuncia ante la Unión Europea (la obra del acceso al puerto se pagó en parte con fondos europeos) y solicitaba a la Xunta que no firmase el convenio con Fomento que permitiría abrir el acceso a Langosteira. El Gobierno gallego optó por ignorar la petición y firmó el convenio.

Este acuerdo obliga al departamento estatal a indemnizar a la gestora de la autopista por cada vehículo que usa la autovía de Langosteira, ya que para acceder a este vial se debe circular antes por la autopista AG-55.

La declaración aprobada por el pleno también reclamaba la creación "lo más rápido posible" de una mesa de trabajo sobre las infraestructuras en Arteixo en la que participasen el Concello, la Xunta y Fomento. No se llegó a crear en ningún momento.

Confrontación por el peaje

La supresión del peaje de Pastoriza también generó una fuerte confrontación en un pleno de la Diputación el año pasado. El PP, incluido el alcalde de Arteixo, votó en contra de la "eliminación total" de todos los peajes de la AG-55. Se trataba de una propuesta de PSOE, BNG, Alternativa dos Veciños, Marea Atlántica y Compostela Aberta.

El regidor arteixán defendió que la supresión del peaje de Pastoriza es un caso "singular" que podría salir adelante, ya que se trata de que el Ministerio de Fomento no realice una obra y destine esos fondos al peaje de Pastoriza.