¿Qué pasará con los carriles que Fomento construyó en el entorno de O Quinto Pino para esquivar el peaje de Pastoriza? Esta es la pregunta que se hace el alcalde de Arteixo, Carlos Calvelo, que denuncia que el Gobierno los inutilizará una vez esté construida la conexión entre el actual acceso a Langosteira y la tercera ronda. Calvelo los denomina "los carriles de la vergüenza". El regidor asegura que el coste de esta parte de la obra, que forma parte del actual acceso a Langosteira, ha sido de 20 millones de euros. "Es una aberración", afirma el alcalde.
Fomento construyó este enlace para que el tráfico de la autovía de Langosteira no tuviera que pasar por el peaje de Pastoriza. A cambio, el departamento estatal debe indemnizar a la concesionaria de la AG-55, Autoestradas de Galicia. Fomento ha reconocido que dejará de indemnizar a la gestora de la autopista una vez esté abierto al tráfico el nuevo enlace entre la autovía del puerto de Langosteira y la tercera ronda, según indica la declaración de impacto ambiental que salió publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado lunes.
El documento afirma que Fomento considera que no es necesario "mantener el pago del peaje en sombra para el tráfico portuario en la AG-55" debido a que con la nueva conexión se podrá circular sin pagar ningún tipo de canon.
El regidor incluso afirmó en 2016 que denunciará a Fomento ante la Unión Europea (el vial a Langosteira se pagó en parte con fondos europeos) por pretender inutilizar esta parte de la obra. Por el momento no ha cumplido la amenaza.
El Gobierno local de Arteixo tampoco ha conseguido reunirse con el Ministerio de Fomento para abordar la posible supresión del peaje de Pastoriza, en la autopista AG-55, según confirma el alcalde, Carlos Calvelo. El regidor envió una carta en febrero para pedir este encuentro con el ministro, Íñigo de la Serna. No obtuvo ninguna respuesta. Calvelo asegura que el pasado nueve de octubre remitió "otra carta" a Fomento con la misma solicitud.
