Vilaboa rendirá homenaje al pintor Urbano Lugrís. Un mural y un acto festivo recordarán el vínculo del artista con esta localidad de Culleredo, que custodia tres pinturas de su autoría en la iglesia y varios dibujos en las paredes del aulario anexo. Además, escolares aprenden sobre la figura y la obra del pintor en actividades realizadas en el templo y el aulario, como las protagonizadas ayer por alumnos de 4º curso de Primaria del colegio Sofía Casanova.

El mural se pintará en el edificio que hace esquina entre la carretera N -550 y la calle Conduzo, que antes albergaba Casa Rumbo, donde el pintor solía comer. La obra, inspirada en las creaciones de Lugrís, se inaugurará el próximo día 22 de diciembre, cuando se celebrará el acto festivo con intervenciones en homenaje al pintor.

La iniciativa está impulsada por la Asociación In Nave Civitas Lugrís, la misma que promovió la declaración como Bien de Interés Cultural (BIC), recientemente concedida, del mural del artista que permanecía en el antiguo café Vecchio, que ahora ha sido restaurado y trasladado a una sede de la Fundación Abanca en A Coruña. El mural se inaugurará tras una concentración en la iglesia de Vilaboa. Después de descubrir la pintura, se celebrará el acto festivo con intervenciones en la Ferretería Serafín, inmueble en el que Lugrís se hospedaba la temporada que residió en Vilaboa.

La asociación impulsora del homenaje mantiene contacto con el instituto Blanco Amor para analizar la posibilidad de que alumnos de este centro de asignaturas artísticas puedan participar en el mural. La Concejalía de Cultura, que ha ofrecido su colaboración a la entidad, impulsa también la difusión de la figura de Lugrís desde la educación con actividades para escolares, como las realizadas ayer.

Alumnos de Primaria acuden a la iglesia y al aulario y realizan actividades educativas y lúdicas alrededor de la figura de Lugrís. Desde observar reproducciones de pinturas suyas hasta realizar un dibujo al estilo del cadáver exquisito con que surrealistas confeccionaban obras. El historiador municipal y un cuentacuentos guían las actividades.