El pleno de Irixoa aprobó ayer por unanimidad una modificación de las cuentas para reservar fondos para ampliar la red de abastecimiento de agua del municipio. El cambio del presupuesto llegó al pleno por la vía de urgencia solo tres días después de que el Concello emitiese un bando para anunciar cortes de suministro durante las horas centrales del día por la sequía.

Como ya informó este diario, el pequeño municipio rural de Irixoa se ha visto obligado a cortar el suministro de 11.00 a 18.00 horas por el bajo nivel de sus manantiales. Ante la situación de "emergencia", el Concello instó a los vecinos a través de un bando a reducir al máximo su consumo de agua y ha establecido además un "servicio extra de vigilancia para que se cumpla estrictamente la normativa, denunciando y sancionando los usos incorrectos y abusivos".

La modificación de las cuentas para reservar 15.000 euros a la búsqueda de nuevos manantiales ha cogido por sorpresa a la oposición, que también se enteró por las redes sociales del corte de suministro. PSOE y BNG criticaron hace ya unos días la "falta de previsión" del Ejecutivo municipal y lamentaron que no se tomasen medidas antes.

Lo cierto es que la escasez de lluvia ha dejado al descubierto las deficiencias en la red de varios municipios del área, especialmente en el rural. El Concello de Paderne celebró también esta semana un pleno extraordinario para aprobar un modificativo de crédito que permita ejecutar con cargo al remanente obras de ampliación de la red de suministro para "dar solución a los problemas de sequía existentes".

El Gobierno local reserva 24.000 euros para estas obras, con las que pretende ampliar las captaciones de agua. El Ejecutivo municipal dispondrá de ayudas provinciales para ejecutar estos trabajos, con los que pretende garantizar el suministro en el municipio. El alcalde, el socialista César Longo, lamentaba recientemente la falta de previsión de la Xunta y la ausencia de un programa para dotar a los municipios de una red de agua en condiciones de afrontar la actual situación.

Otros concellos como Oza-Cesuras o Aranga también han tenido que tomar medidas excepcionales. El Concello de Oza-Cesuras emitió recientemente un bando en el que informaba que debido a los niveles "mínimos" de agua se habían detectado una "concentración de bacterias" superiores a las aconsejables en Cesuras, aunque finalmente que era potable. El Ayuntamiento de Aranga se vio obligado en agosto a recurrir a camiones cisterna y Betanzos no oculta su preocupación por los niveles del Mendo y espera que las obras pendientes de la Xunta en la ETAP mejoren la situación.