Las protestas de los vecinos de Perillo para reclamar mejoras en la seguridad vial en la Avenida das Mariñas, el tramo más urbano de la N-VI, no son las únicas demandas vecinales a pie de esta carretera nacional. Municipios de la comarca como Bergondo, Betanzos o Coirós aguardan desde hace años mejoras que humanicen los tramos que atraviesan los núcleos poblados o que eliminen puntos negros.

Las obras se hacen de rogar. El Concello de Oleiros ha convocado varias protestas por el retraso de un proyecto que considera clave y que acumula años de retraso: la remodelación del cruce de Sol y Mar, en Perillo y la instalación de las pasarelas peatonales.

Otro de los proyectos que el Gobierno central aún no ha ejecutado es la construcción de una rotonda en el desvío hacia Ferrol en la Nacional VIconstrucción de una rotonda en el desvío hacia Ferrol en la Nacional VI. Este cruce es un punto de concentración de accidentes y Demarcación de Carreteras anunció hace ya años su propósito de remodelar el tramo. Su plan pasa por ejecutar una turborrotonda y, según informó al Concello, el proyecto ya está redactado y pendiente de que se apruebe su exposición al público.

No es el único tramo de la N-VI que atraviesa Bergondo pendiente de mejoras. Fomento se ha comprometido a remodelar el vial que atraviesa Cortiñán, donde ha realizado ya algunas mejoras de urgencia tras las protestas vecinales por los atropellos registrados en un paso de peatones. Otra tramo conflictivo ha llevado a la comunidad educativa del Centro de Formación Experimental Agroforestal (CFEA) de Bergondo, el Ayuntamiento y el tejido empresarial del polígono a unirse para reclamar la "instalación urgente" de una pasarela peatonal elevada en la Nacional VI, a la altura de este centro de formación en Guísamopasarela peatonal elevada en la Nacional VI.

Los deberes pendientes de Fomento en la Nacional VI han llevado también a los vecinos de Coirós a movilizarse para reclamar que cumpla una antigua promesa: la supresión del punto negro de Queirís. Los residentes han puesto en marcha una campaña de recogida de firmas para exigir mejoras en la intersección en la que se bifurca la Nacional VI en dirección a A Coruña y Betanzos, un cruce peligroso que aguarda por mejoras desde hace casi una década.

El Gobierno prometía en 2009 que incluiría la mejora de este tramo en el plan integral de mejora y acondicionamiento de la Nacional VI dado que, incidía, se habían registrado varios accidentes mortales. Su compromiso nunca pasó del papel.

Betanzos también ha reclamado en varias ocasiones mejoras en la Nacional VI. El Concello solicitó a Fomento mejoras en el tramo de A Angustia tras las quejas de los vecinosA Angustia por el riesgo que supone cruzar la nacional en este punto, con una importante pendiente y una sucesión de curvas de escasa visibilidad. El Estado rechazó en 2015 la petición del Concello y los vecinos alegando que este tramo de la carretera no "cumplía los requisitos de una travesía" y que la señalización de pasos de peatones "podría tener "efectos negativos desde el punto de vista de la seguridad".

El colapso que registra la Nacional VI ha llevado también al Ayuntamiento de Betanzos a reclamar la supresión del peaje de Guísamo y Macenda.