La concesionaria del servicio de abastecimiento de agua y de saneamiento de Bergondo, Viaqua, ha interpuesto un recurso contencioso administrativo contra el Concello por la denegación de su solicitud de reequilibrio financiero. La empresa reclama al Ayuntamiento más fondos para asumir el coste de la entrada en funcionamiento de nuevos bombeos y por la modificación de las tarifas que entró en vigor en el último trimestre de 2016 y que, alega, ha mermado su recaudación.

La compañía reclama 25.289 euros más al año, según informó la alcaldesa, Alejandra Pérez.

La regidora firmó una resolución publicada ayer en el Boletín Oficial de la Provincia por la que acuerda personarse en el procedimiento judicial y remitir al juzgado el expediente administrativo.

Este recurso llega después de que el pleno acordase en septiembre desestimar la petición de reequilibrio financiero de la concesionaria, una solicitud que fue informada desfavorablemente por Intervención. En su informe, la habilitada nacional concluye que no procede acceder a la petición de la concesionaria. Recuerda que en 2012 se realizó una modificación del contrato y de la ordenanza fiscal para incluir una tasa en concepto de depuración para restablecer el equilibrio económico de la concesión y que en esta modificación ya se ponía en manifiesto que "todo lo que aumente o minore el coste forma parte del riesgo y ventura que rige toda contratación administrativa".

La funcionaria argumenta además que la concesionaria no alegó en su momento contra la modificación de las tarifas y no considera que deba ser resarcida por los costes de reforma del bombeo de la EDAR de A Fraga. Intervención alega nuevamente que ya ha sido aprobada una tasa de depuración, por lo que "la existencia o no de desequilibrio forma parte del riesgo y ventura de la concesión". "No procede la imputación de ningún conste previsible, puesto que también va a dar lugar a ingresos como contrapartida", aduce la funcionaria, que destaca el hecho de que esta reforma generará nuevas altas y nuevos ingresos. "Nuevas redes implican más costes, pero también más usuarios que van sufragando los mismos", concluye.