"Lo acepto gustoso por tratarse de un obsequio de mi tierra". En diciembre de 1938, Francisco Franco agradecía con estas palabras la donación del pazo de Meirás en calidad de "fundador del nuevo imperio, Jefe del Estado, Generalísimo de los Ejércitos y Caudillo de España". Tres años después, el banquero Pedro Barrié de la Maza, uno de los impulsores de la Junta Pro Pazo, registraba en representación del dictador a través de un poder notarial la compra del inmueble y de las fincas colindantes por 85.000 pesetas a las herederas de Emilia Pardo Bazán.

Es precisamente esa zona en sombra, esa indefinición entre el supuesto obsequio y la posterior inscripción en el Registro de la Propiedad como una compraventa sin ningún tipo de alusión a la donación, la que centra la primera iniciativa concreta para incorporar el pazo de Meirás al patrimonio público. Sadamaioría, partido que ostenta la Alcaldía en Sada, propone explorar esta anomalía como vía para recuperar el inmueble, adquirido en plena guerra civil mediante ventas forzadas, descuentos en nóminas de los funcionarios, aportaciones públicas y emisión de bonos supuestamente de compra voluntaria.

La formación insta a la Xunta a presentar de inmediato en el juzgado una acción de nulidad del título de la "fraudulenta adquisición" por Francisco Franco del pazo de Meirás. "Consta acreditada la simulación de una compraventa que, en realidad no fue tal", argumenta. El partido destacan que le corresponde a la Xunta plantear esta acción de nulidad, dado que ostenta las competencias en materia de tutela del patrimonio histórico-artístico.

Ante el anuncio de su próxima venta por parte de la familia Franco, Sadamaioría advierte de que este proceso debe llevar aparejado una anotación preventiva en el Registro de la Propiedad para advertir a posibles interesados en adquirir el pazo. "Una hipotética transmisión a terceros supondría una dificultad añadida para su incorporación al patrimonio público, incluso en caso de que prosperase la acción de nulidad", advierte la formación.

Esta advertencia tiene fundamento en el artículo 1307 del Código Civil, que establece que "siempre que el obligado por la declaración de nulidad a la devolución de la cosa no pueda devolverla por haberla perdido, deberá restituir los frutos percibidos y el valor que tenía la cosa cuando se perdió". En la práctica, los juzgados han equiparado la pérdida a la que apela el Código Civil con la venta a un tercero de buena fe, por lo que podría darse el caso que, vendido el pazo y aun en caso de que se anulase su adquisición por parte del dictador, no pueda recuperarse la propiedad y los Franco solo tendrían que "el valor que tenía la cosa cuando se perdió".

El anuncio de su posible venta ha acelerado los trámites de la Administración para intentar recuperar el pazo para el patrimonio público. Aunque la Xunta considera que se trata un "globo sonda" y una "trampa" para forzar su compra por parte de la Administración, ha accedido a convocar a petición del Concello de Sada la comisión de expertos, que se reunirá el próximo lunes a las 17.00 horas para evaluar las alternativas.

La Diputación ha convocado también la Junta Pro Devolución del Pazo de Meirás, que se celebrará el próximo 1 de marzo. La vicepresidenta, la nacionalista Goretti Sanmartín, ha avanzado que en la reunión se presentarán los informes históricos y jurídicos, que plantean "una opción" para recuperar el pazo. La institución provincial evitó dar detalles a este diario sobre las vías que planteará antes de informar a todos los concellos y colectivos que forman parte de la Junta.