El bar de Sada en el que la Guardia Civil y la Policía Local realizaron una redada en la madrugada del viernes al sábado abrió con normalidad tras la intervención policial, informó ayer su responsable. El hostelero, quien juzgó exagerado el despliegue de las fuerzas de seguridad, aseguró que no se habían practicado detenciones en el local por tenencia de drogas y aseguró que, de entre las "cuarenta personas" que había en el interior del local, los agentes solo se incautaron de una pequeña cantidad de marihuana o hachís y "un gramo" de cocaína que portaba uno de los presentes.