La Xunta permitirá construir piscifactorías en Red Natura a cambio de que el sector cumpla las medidas correctoras y de protección del medio ambiente que la propia Administración gallega le exija para nuevas plantas acuícolas en la costa.

Las Consellerías de Medio Ambiente y Mar transmitieron al sector, en un encuentro celebrado hace algo más de un mes, la posibilidad de fijar más áreas en el litoral gallego, a mayores de las ya reservadas en el actual mapa acuícola, para nuevas granjas. Los enclaves que las empresas productoras de rodaballo propongan serán analizados por la Consellería de Medio Ambiente,en el marco del nuevo Plan de Ordenación del Litoral (POL) y, en función del grado de protección medioambiental de la zona, la Administración dará su visto bueno, los descartará o permitirá construir con las medidas correctoras y compensatorias pertinentes, según fuentes de la patronal.

El plan sectorial de acuicultura, modificado recientemente por el actual Gobierno (con la incorporación de Touriñán y Lires y la eliminación de cuatro ubicaciones en A Costa da Morte) establece 22 emplazamientos en el litoral para construcción y ampliación de granjas. Para estos enclaves, las empresas productoras de rodaballo ya pueden presentar a la Xunta sus proyectos con el objetivo de hacerse con la adjudicación de cada área. De hecho, según fuentes del sector, ya están redactados 10 de proyectos de ampliación. No obstante, desde ahora y hasta la aprobación definitiva del plan sectorial a final de año, es posible añadir algún enclave más cambiar una zona por otra, según explica Fernando Aroga, gerente de la Asociación de Productores de Rodaballo de Galicia (Aroga).

Impacto ambiental

El propio conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, Agustín Hernández, señalaba recientemente que todos aquellos proyectos sujetos al criterio de una instalación supramunicipal de interés para la comunidad autónoma, "se podrán llevar a cabo siempre y cuando cumplan con los informes o dictámenes ambientales correspondientes". Precisamente ayer, la conselleira do Mar, Rosa Quintana, mostró la disposición de la Xunta a "incluir todas las posibilidades" de ubicación de piscifactorías en espacios de la Red Natura "siempre y cuando se respete al máximo la directiva comunitaria".

"Con las nuevas áreas de protección que está dibujando Medio Ambiente en el POL la ubicación de las piscifactorías será flexible. Podemos proponer zonas, aunque está claro que no quedan demasiadas que sean rentables. Medio Ambiente se compromete a analizar su viabilidad, a decir sí o no y qué medidas correctoras de protección tendríamos que poner en cada enclave", explica el gerente de Aroga, que engloba al 80% de las compañías que optan a construir granjas en la comunidad.

Con la nueva gestión de la ocupación del suelo que está dibujando la Consellería de Medio Ambiente en el marco del nuevo POL se abren nuevas expectativas para los productores. ¿El escenario? Tres tipos de áreas: "sin protección, media o alta". En función de la ubicación, según explica el propio sector, Medio Ambiente exigirá un determinado porcentaje de "medidas protectoras, correctoras o compensatorias", como paso imprescindible para poder obtener una declaración de impacto ambiental positiva.

"Si las medidas correctoras son excesivas, porque el nivel de protección de la zona así lo requiere, ya no sería rentable. Sólo elaborar un proyecto de granja cuesta 100.000 euros, por eso hay que tener la seguridad jurídica antes. Si la protección es viable, como añadir una cubierta vegetal, por ejemplo, podríamos incluir algún enclave más, claro. Lo que pedimos ahora a la Dirección xeral de Sostenibilidade e Paisaxe es que concrete los criterios de protección medioambiental que se nos van a exigir", concluye Fernando Otero.

Para entender el mapa acuícola de Galicia, tras continuos intentos frustrados para aprobarlo, hay que retrotraerse cinco años. El plan sectorial del ex conselleiro de Pesca, Enrique López Veiga, listo teóricamente en 2005, fue revisado en el bipartito por la ex conselleira de Pesca, Carmen Gallego. Lograda una nueva redacción en 2008, tampoco llegó a materializarse. El Gobierno de Feijóo, a través de su conselleira del Mar, Rosa Quitana, también se comprometió a retocarlo.

Constaba de 24 ubicaciones. Tras la decisión del actual ejecutivo de retirar cuatro ubicaciones y añadir dos (ver mapa), la tercera fase del plan cuenta con 22 enclaves aptos para granjas.