El Servizo de Gardacostas de Galicia se incautó de 744 aparejos, decomisó de 1.123 kilos de pescado y marisco y expulsó a 199 furtivos en los últimos días con mareas vivas, cuando la bajamar deja al descubierto bancos naturales habitualmente bajo el agua. Por tal circunstancia, Mar decidió intensificar la vigilancia y control en previsión de un repunte del furtivismo.

En la ría de Ferrol se desarrollaron actuaciones de las que resultó el decomiso de 149 útiles, entre ellos dos vehículos, y de 358 kilos de pescado y marisco, la mayor parte almeja y berberecho. Los guardacostas expulsaron a 172 furtivos e identificaron a diez personas. En A Coruña, los inspectores expulsaron a cuatro personas y levantaron 14 actas de presunta infracción. En la zona se requisaron 46 artes y 372 kilos de varias especies, principalmente erizo. En Muxía, se requisaron 34 aparejos y 74,9 kilos de género. Las actuaciones en la Ría de Arousa se saldaron con la incautación de cinco nasas y 19 kilos de varias especies en Ribeira, de donde se expulsó a 20 personas.

En Cabo de Cruz fueron expulsadas otras tres personas, se retiraron dos aparejos y se identificaron otras seis personas con 7,5 kilos de longueirón, 3 de almeja y 20 de berberecho. En la parte sur de la ría, se decomisaron 151 nasas con 94,5 kilos de pulpo y nécora.