Un naufragio sin víctimas frente a las costas de Portugal. Un potente remolcador de altura y salvamento, con bandera de Panamá pero con base en Cartagena y operado por la armadora española Boluda, se hundió ayer frente a las costas de Portugal cuando transportaba desde el puerto cartagenero al de A Coruña un dique flotante.
Sus once tripulantes fueron rescatados ilesos por dos buques mercantes que se encontraban en las inmediaciones y navegan rumbo al puerto francés de Brecht y el belga de Antuerpia. Un remolcador de Vigo y otro de la localidad portuguesa de Viana do Castelo intentaban ayer por la tarde recuperar la carga, pues el dique flotante quedó a la deriva y suponía un grave peligro para la navegación en la zona.
El mayday, llamada de auxilio pro radio a través del canal 16, del remolcador Antártico, que naufragó a 70 millas al Oeste de la localidad lusa de Póvoa de Varzim, se recibió en el Centro de Coordinación de Busca y Salvamento Marítimo (MRCC) de Lisboa sobre las diez y media de la mañana.
El MRCC localizó y contactó con los mercantes Artic Voyager y UCT Elizabeth que eran los que navegaban por la zona más próxima al hundimiento, que se dirigieron al lugar del naufragio y se ocuparon del rescate de la tripulación en dos lanchas salvavidas. Los náufragos se encuentran bien y no precisaron asistencia médica, según informaron los responsables de Salvamento de Portugal.
El primero de los mercantes, el Artic Voyager, recogió siete tripulantes del remolcador hundido y se dirige a Brecht. Mientras, el UCT Elizabeth se hizo cargo de los otros cuatro, que serán desembarcados en Antuerpia.
Salvamento de Portugal envió, además, al lugar del hundimiento a la patrullera lusa NRP Zaire y al avión de la fuerza aérea portuguesa C-295, que prestaba auxilio en el naufragio de un velero en las proximidades de Lisboa.
Tripulación
Los once tripulantes que cubrían la ruta desde Cartagena a A Coruña a bordo del remolcador Antártico, un ciudadano español y diez ciudadanos cubanos, se encuentran a salvo e ilesos, según la MRCC.
Salvamento Marítimo de Lisboa tuvo que prestar ayer asistencia a dos naufragios en apenas tres horas. Cuando saltó la llamada de auxilio del Antártico, los efectivos ultimaban el rescate y evacuación de los cuatro tripulantes alemanes del velero holandés Zara, que sufrió una vía de agua en el casco a 250 millas al oeste de Lisboa y amenazaba con hundirse. Entre las dos operaciones fueron rescatados 14 marineros ilesos.
