La Comisión Europea presentó ayer en la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo su segundo informe del posible impacto que para la flota comunitaria podría tener la prohibición del arrastre y enmalle de fondo con el objetivo de proteger a medio centenar de especies de profundidad, así como ecosistemas marinos vulnerables. Y en ese informe, al que ha tenido acceso este diario, se valora como caso específico el de la flota atlántica española (gallega en su inmensa mayoría). El balance plantea que solo el 0,7% de los viajes de pesca de barcos arrastreros y un 2,1% de los que usan redes de enmalle pueden verse afectados por el tope máximo del 10% de pesca de especies de profundidad por lance.

Esto sugiere a la CE que "en una abrumadora mayoría de los viajes de pesca de esta flota no se registra una cantidad significativa" de esas especies por lo que la CE espera que la aplicación del nuevo reglamento tenga "un efecto muy limitado en estas flotas".

Similar planteamiento de impacto muy limitado sobre la flota mantuvo ayer la organización ecologista Oceana, partidaria de la prohibición planteada por la CE por entender que "la pesca de profundidad daña los ecosistemas, atenta contra especies como corales y esponjas y además, no es comercialmente rentable". Así, Oceana cifra en un 1,4% el volumen de capturas de fondo en el Atlántico Nordeste, cuya gestión hasta ahora fue calificada de "ineficaz".

Visión bien diferente mantiene la flota afectada, uno de cuyos portavoces ante Bruselas, el gallego Iván López, señaló que el informe "está lleno de lagunas y amigüedades" y "sin datos concretos".

El Ministerio de Agricultura, por su parte, entiende que "no se basa en datos científicos", sino que interpreta "restrictivamente" el enfoque de precaución, en vez de regular estas pesquerías. Además, señala que el arte de arrastre no tiene por qué ser "objeto de condena", dado que es un "arte autorizado". Agricultura estima que se verían afectados cerca de 400 buques españoles con la medida.

Por otra parte, ayer la Comisión de Pesca dio luz verde en segunda lectura, a la reforma del reglamento de la Política Pesquera Común y al de la Organización Común de Mercados. El socialista Antolín Sánchez-Presedo calificó de "positivo" el consenso alcanzado ya que responde a una "orientación de sostenibilidad" y "corrige los problemas" que la propuesta de reforma planteaba para Galicia y España".